Dos meses después de la matanza realizada por un comando terrorista en la casa de ancianos de Aden, en Yemen, donde perdieron la vida cuatro religiosas Misioneras de la Caridad junto con otras 12 personas, todavía no se tienen noticias seguras del padre Tom Uzhunnalil, el sacerdote salesiano secuestrado por los yihadistas
(Fides) En ausencia de información verificada, los rumores continúan circulando acerca de si sigue con vida y sobre las negociaciones en curso para lograr su liberación.
«Las últimas palabras, en un cierto sentido tranquilizadoras, las he recibido indirectamente hace unos diez días. Me dijeron que el padre Tom está vivo, y que podría ser puesto en libertad de forma inminente. Pero desde entonces no ha pasado nada. Esperamos y oramos por él» refiere la Agencia Fides el obispo Paul Hinder OFM Cap, Vicario apostólico para Arabia meridional.
En las negociaciones están trabajando los aparato de seguridad locales, que continúan siguiendo la historia con la debida discreción, incluso en ausencia de acontecimientos concretos.
Durante la Semana Santa, circularon rumores en internet que informaban de la muerte por crucifixión del sacerdote salesiano de nacionalidad india. Pero el martes, 29 de marzo, la Congregación Salesiana, en un comunicado oficial, instó a todos a no dar crédito a los falsos anuncios que se emiten en la red sobre la situación del padre Tom.
Mientras tanto, las religiosas de la Madre Teresa en Yemen continúan trabajando en sus casas de Sana'a y de Hodeyda, al servicio de los que más sufren, en un país todavía desgarrado por el conflicto entre las fuerzas gubernamentales y los rebeldes Huthi.