Julio Vasquez.

Radio Renacer

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lunes, 30 de noviembre de 2015

Papa dice que el mundo está "al borde de un suicidio" y pide un acuerdo en París

  El papa Francisco dijo hoy que el mundo está "al borde del suicidio" a causa del cambio climático e instó a los líderes que se reúnen en la cumbre de París (COP21) a alcanzar un acuerdo porque, en su opinión, es "ahora o nunca".
"No estoy seguro, pero puedo decir que es ahora o nunca más. La primera cumbre creo que fue en Tokio y se ha hecho poco. Cada año los problemas son más graves", dijo el papa durante el vuelo que le trajo de vuelta de su viaje a África según informa "La Stampa"
El pontífice afirmó tener "confianza en estas personas, para que hagan algo".
"Espero que sea así y rezo por ello", concluyó Jorge Bergoglio, muy concienciado sobre esta cuestión, que le ha llevado a publicar la encíclica "Laudato Sì", dedicada enteramente al medio ambiente.
París acoge desde este lunes una cumbre sobre el cambio climático en la que durante once días se buscará un acuerdo que frene el calentamiento global y sustituya al Protocolo de Kioto de 1997.
A esta cumbre, bajo presidencia de Francia, asisten jefes de Estado o de Gobierno de 195 países, entre ellos los socios de la Unión Europea (UE), que buscarán un acuerdo global sobre el cambio climático para que la temperatura del planeta no aumente más de 2 grados a finales de siglo (frente a los 2,7 grados que implicarían las contribuciones actuales).

Papa Francisco concluye su primer viaje a África y regresa a Roma

El Papa Francisco se encuentra ya en el avión de regreso que le lleva a Roma después del viaje de seis días que ha realizado en África, desde el pasado 25 de noviembre. En su primera Visita Apostólica a este continente acudió a Kenia, Uganda y por último a la República Centroafricana, desde cuya capital, Bangui, emprendió el regreso.
El Pontífice abordó el avión a las 12:30 (hora local) después de una breve ceremonia de despedida con la participación del Jefe de Estado de la Transición, Catherine Samba-Panza y el Nuncio Apostólico, Mons. Franco Coppola. Estuvieron presentes otras autoridades del país, obispos y una representación de fieles.
Está previsto que el avión del Papa aterrice en el Aeropuerto Internacional de Fiumicino, en Roma, tras más de seis horas de viaje, a las 18:45 hora local.

Aciprensa

La familia peligra ¿Qué haremos entonces?

Hoy día hablar de la familia para muchos es un tema desfasado y obsoleto, ya que las preocupaciones humanas, al parecer, se encuentran concentradas en otras inquietudes. El interés hay que buscarlo en el desarrollo de la economía, en estrategias políticas, en fortalecer el turismo y en el intercambio cultural entre las naciones. Como siempre ha existido un grupo de personas, que según el contexto social, han recibido diferentes nombres: tribu, clan, casta, linaje, estirpe, familia, etc., se da por supuesto que es normal los conflictos que se puedan efectuar dentro de ella. 
    
La raíz de todos los males, directa o indirectamente, se encuentran en la familia. En ella, cada individuo recibe su primera educación, la plataforma donde construirá el edificio de su personalidad. Porque lo que somos no es fruto del azar. El factor hogar, el ejemplo de los progenitores, y el modo cómo se les enseña la formación de la conciencia a los niños, tendrá una gran influencia cuando la persona llegue a su edad adulta. Y aunque hay otros componentes que forman parte de la actitud que se asume en la vida, la columna familiar representa el eje central  para la identidad intachable de todo ser humano.
    
Los grandes líderes del mal: narcotraficantes, sicarios, estafadores, asesinos, violadores, y demás personas involucradas en hechos delictivos, todos provienen de una familia. Nacieron y se desarrollaron junto algún pariente. Algunos de ellos se criaron solos, pero la mayoría de las personas tuvieron al menos, el calor de una madre, el aprecio de un padre, el apoyo de unos hermanos, el consentimiento de unos tíos o quizás la alegría de unos abuelos, quienes pese a lo poco que poseían, le bridaron un poco de amor sincero para que quedara en ellos cierta imagen impresa del sentimiento puro que deberían recordar siempre, especialmente cuando llegaran las circunstancias complejas de la vida. 
    
La familia ya no es la misma, continúa cambiando. Ahora la mentalidad, en ocasiones, es al revés, porque los hijos se comportan como los padres, y los padres sin darse cuenta se vuelven hijos. Ya en muchas viviendas solo se vive, ya no se convive. Únicamente comen y duermen. La obediencia, el respeto y la educación, ya no son deberes, son opciones, la asumen quienes la cataloguen como parte fundamental en su ser. En otras palabras, el concepto “familia” fue  absorbido lentamente de su sentido original y real. 
    
La sociedad se compone de familias. Pero si dejamos morir esa riqueza humana y espiritual, salida desde el mismo Creador, entonces la especie humana se extinguirá, dejaremos de existir y el planeta se quedará sin humanos. Por consiguiente, no es con fórmulas mágicas que transformaremos esta realidad, tampoco haciendo grandes proyectos, esto se hará de modo sencillo, iniciando con el cambio de actitud de nuestra propia realidad familiar, y ayudando las familias que nos queden más cerca, porque al final de todo, familia somos todos, y cuando uno se desvía, el dolor ajeno debería ser personal y colectivo. 
Luis Alberto De León Alcántara 

El Papa a los musulmanes: «Quien dice que cree en Dios ha de ser también un hombre o una mujer de paz»

El Santo Padre mantuvo un encuentro con la Comunidad musulmana esta mañana en la capital de la República Centroafricana, Bangui, en la Mezquita central de Koudoukou. El Papa volvió hacer un llamado a reconocer que «todos somos hermanos» y rechazar la violencia, en esta ocasión, entre musulmanes y cristianos. Por ello afirmó que todo creyente en Dios debe ser un hombre de paz.
(ACI Prensa) «Cristianos y musulmanes somos hermanos. Tenemos que considerarnos así, comportarnos como tales. Sabemos bien que los últimos sucesos y la violencia que ha golpeado su país no tenía un fundamento precisamente religioso».
«Quien dice que cree en Dios ha de ser también un hombre o una mujer de paz», aseguró el Papa.
Francisco reconoció que «cristianos, musulmanes y seguidores de las religiones tradicionales, han vivido juntos pacíficamente durante muchos años». Por eso «tenemos que permanecer unidos para que cese toda acción que, venga de donde venga, desfigura el Rostro de Dios y, en el fondo, tiene como objetivo la defensa a ultranza de intereses particulares, en perjuicio del bien común».
«Juntos digamos ‘no’ al odio, a la venganza, a la violencia, en particular a la que se comete en nombre de una religión o de Dios. Dios es paz, salam».
El Papa deseó que las próximas elecciones nacionales en el país sepan unir a la población «convirtiéndose en símbolos de la unidad de la nación, más que en representantes de una facción».
«Los animo vivamente a trabajar para que su país sea una casa acogedora para todos sus hijos, sin distinción de etnia, adscripción política o confesión religiosa», dijo Francisco.

sábado, 28 de noviembre de 2015

«Vuestro testimonio de fidelidad a la fe es muy valioso para los cristianos que hoy son tentados por la secularización y el relativismo»

El Obispo de San Sebastián, José Ignacio Munilla, ha subrayado que la comunidad islámica es «gente de paz» y pide que «no nos dejemos engañar por los terroristas». Asimismo, ha pedido su ayuda para reivindicar ante los gobiernos de los países islámicos «la libertad religiosa para los cristianos de aquellos lugares que están padeciendo situaciones de persecución, a veces incluso de forma dramática».
(EP) Munilla ha realizado estas afirmaciones en la inauguración oficial del centro cultural islámico de San Sebastián, en la que también ha participado el alcalde donostiarra, Eneko Goia, y representantes municipales como la portavoz de EH Bildu en el Ayuntamiento, Amaia Almirall.
Este centro, el mayor de los doce con los que cuenta Guipúzcoa, no se dedica exclusivamente al culto sino que ofrece diferentes actividades culturales como clases de árabe, español, o de lectura del Corán. Unas 200 personas acuden cada viernes al rezo en este espacio, que lleva en funcionamiento desde el pasado mes de abril.
En el acto de inauguración, la activista de Derechos Humanos y representante de la comunidad islámica Tarana Karim ha destacado la importancia del mismo para «enseñar el Islam a todas las personas que se acerquen», así como para «fomentar la convivencia entre los vecinos».
Karim, otro de los representantes del centro, ha destacado la importancia de contar con este acto con las autoridades municipales y eclesiásticas «sobre todo en estos momentos tan especiales», tras los atentados de París. En esa línea, ha agradecido la «voluntad de acercarse, de entender, de convivir con las diferencias» que muestra la sociedad donostiarra.
De este modo, ha destacado la «buena convivencia» de estos años en Guipúzcoa y ha apostado por «afianzarla» y avanzar «hacia nuevos retos». Por ello, ha considerado «fundamental» construir «espacios comunes de convivencia» y ha resaltado que este centro donostiarra «no es un lugar únicamente de culto porque el 80% de sus actividades son espacios para la convivencia».
Asimismo, ha querido mostrar su agradecimiento a «quienes nos han acogido», al tiempo que ha desvinculado el terrorismo del Islam y ha incidido en que «Daesh que no nos representa para nada». «La sociedad no discrimina, por fortuna en el País vasco no sentimos islamofobia, si hay algo es aislado», ha asegurado.
De este modo, ha resaltado que «hay mucha concienciación entre los vascos por diferenciar que es una religión muy lejos de lo que estamos viendo en Francia y en otros países del mundo, el terrorismo no tiene ni religión ni cultura». Finalmente, ha reiterado su agradecimiento a las personas que «antes de juzgar a un modo de vida que es el Islam se preocupan de juzgar primero su propia ignorancia, porque antes de ser musulmanes o cristianos o judíos somos personas».
En su intervención, el Obispo de San Sebastián se ha congratulado por la apertura de este Centro Cultural Islámico, «cuya razón de ser no es únicamente el principio sagrado de la libertad religiosa, sino también la misma convicción de la riqueza del encuentro intercultural».
«El verdadero encuentro no requiere compartir una misma cosmovisión sino que, muy al contrario, supone la fidelidad a la propia identidad cultural y religiosa, desde la que estamos llamados a colaborar en la promoción de la justicia social, los bienes morales, la paz y la libertad para todos los hombres», ha afirmado.
Munilla ha recordado los «lazos de hermandad» entre ambas comunidades religiosas y ha ofrecido el apoyo de la Iglesia para que las familias musulmanas «puedan disponer, entre nosotros, de los medios necesarios para educar a sus hijos según sus convicciones religiosas, en conformidad al artículo 27.2 de nuestra Constitución».
«Vuestro testimonio de fidelidad a la fe y a vuestras raíces culturales, es muy valioso para los cristianos que hoy son tentados por la secularización y el relativismo», ha manifestado.
Asimismo, el prelado donostiarra ha solicitado ayuda a esta comunidad para «reivindicar ante los gobiernos de los países islámicos la libertad religiosa para los cristianos de aquellos lugares que están padeciendo situaciones de persecución, a veces incluso de forma dramática». «Confiamos en que vuestra reivindicación en favor de la reciprocidad en el principio de libertad religiosa, formulada desde las comunidades musulmanas en Europa, tendría un gran peso moral», ha concluido.

Palabras dirigidas por Monseñor Munilla a los asistentes

Querida Comunidad Islámica de Gipuzkoa:
Nos congratulamos por la apertura de este Centro Cultural Islámico, cuya razón de ser no es únicamente el principio sagrado de la libertad religiosa, sino también la misma convicción de la riqueza del encuentro intercultural. El verdadero encuentro no requiere compartir una misma cosmovisión; sino que, muy al contrario, supone la fidelidad a la propia identidad cultural y religiosa, desde la que estamos llamados a colaborar en la promoción de la justicia social, los bienes morales, la paz y la libertad para todos los hombres.
Quisiera compartir con vosotros tres breves reflexiones:
1.- Recordemos nuestros lazos de hermandad, tal y como fueron expresados, hace cincuenta años, por el Concilio Vaticano II, en la declaración «Nostra Aetate»: «La Iglesia mira también con aprecio a los musulmanes que adoran al único Dios, viviente y subsistente, misericordioso y todopoderoso, creador del cielo y de la tierra; que habló a los hombres, a cuyos ocultos designios procuran someterse con toda el alma, como se sometió a Dios Abraham, a quien la fe islámica mira con complacencia. Veneran a Jesús como profeta, aunque no lo reconocen como Dios; honran a María, su Madre virginal, y a veces también la invocan devotamente. Esperan, además, el día del juicio, cuando Dios remunerará a todos los hombres resucitados. Por ello, aprecian la vida moral, y honran a Dios sobre todo con la oración, las limosnas y el ayuno.»
2.- Os expresamos y ofrecemos nuestro apoyo, para que las familias musulmanas puedan disponer, entre nosotros, de los medios necesarios para educar a sus hijos según sus convicciones religiosas, en conformidad al artículo 27.2 de nuestra Constitución: «Los poderes públicos deben garantizar el derecho que asiste a los padres para que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones». Vuestro testimonio de fidelidad a la fe y a vuestras raíces culturales, es muy valioso para los cristianos que hoy son tentados por la secularización y el relativismo.
3.- Pero además de expresaros nuestro apoyo, también os quiero solicitar vuestra ayuda, para reivindicar ante los gobiernos de los países islámicos, la libertad religiosa para los cristianos de aquellos lugares que están padeciendo situaciones de persecución, a veces incluso de forma dramática. Confiamos en que vuestra reivindicación en favor de la reciprocidad en el principio de libertad religiosa, formulada desde las comunidades musulmanas en Europa, tendría un gran peso moral.
No quisiera concluir sin agradeceros de corazón, la invitación que nos habéis hecho para compartir esta celebración. Cristianos y musulmanes, nos sabemos herederos de la bendición que Yavhé dirigió a través de Abraham a todos los pueblos de la Tierra: «Por ti se bendecirán todos los linajes de la tierra» (Gn 12, 3). ¡Bendigamos a Dios porque es eterna su Misericordia!

Homilía del Papa en la Misa en el Santuario de los mártires de Namugongo

 El Papa Francisco ha presidido esta mañana la Santa Misa en el Santuario de los mártires de Namugongo, en Kampala, Uganda. En la homilía puso de ejemplo a estos mártires y señaló que "el testimonio de los mártires muestra, a todos los que han conocido su historia, entonces y hoy, que los placeres mundanos y el poder terreno no dan alegría ni paz duradera".
A continuación, el texto completo de la homilía:
«Recibirán la fuerza del Espíritu Santo que descenderá sobre ustedes, y serán mis testigos en Jerusalén, en toda Judea y Samaría, y hasta los confines de la tierra» (Hch 1,8).
Desde la época Apostólica hasta nuestros días, ha surgido un gran número de testigos para proclamar a Jesús y manifestar el poder del Espíritu Santo. Hoy, recordamos con gratitud el sacrificio de los mártires ugandeses, cuyo testimonio de amor por Cristo y su Iglesia ha alcanzado precisamente «los extremos confines de la tierra». Recordamos también a los mártires anglicanos, su muerte por Cristo testimonia el ecumenismo de la sangre. Todos estos testigos han cultivado el don del Espíritu Santo en sus vidas y han dado libremente testimonio de su fe en Jesucristo, aun a costa de su vida, y muchos de ellos a muy temprana edad.
También nosotros hemos recibido el don del Espíritu, que nos hace hijos e hijas de Dios, y también para dar testimonio de Jesús y hacer que lo conozcan y amen en todas partes. Hemos recibido el Espíritu cuando renacimos por el bautismo, y cuando fuimos fortalecidos con sus dones en la Confirmación. Cada día estamos llamados a intensificar la presencia del Espíritu Santo en nuestra vida, a «reavivar» el don de su amor divino para convertirnos en fuente de sabiduría y fuerza para los demás.
El don del Espíritu Santo se da para ser compartido. Nos une mutuamente como fieles y miembros vivos del Cuerpo místico de Cristo. No recibimos el don del Espíritu sólo para nosotros, sino para edificarnos los unos a los otros en la fe, en la esperanza y en el amor. Pienso en los santos José Mkasa y Carlos Lwanga que, después de haber sido instruidos por otros en la fe, han querido transmitir el don que habían recibido. Lo hicieron en tiempos difíciles. No estaba amenazada solamente su vida, sino también la de los muchachos más jóvenes confiados a sus cuidados. Dado que ellos habían cultivado la propia fe y habían crecido en el amor de Cristo, no tuvieron miedo de llevar a Cristo a los demás, aun a precio de la propia vida. Su fe se convirtió en testimonio; venerados como mártires, su ejemplo sigue inspirando hoy a tantas personas en el mundo. Ellos siguen proclamando a Jesucristo y el poder de la cruz.
Si, a semejanza de los mártires, reavivamos cotidianamente el don del Espíritu Santo que habita en nuestros corazones, entonces llegaremos a ser de verdad los discípulos misioneros que Cristo quiere que seamos. Sin duda, lo seremos para nuestras familias y nuestros amigos, pero también para los que no conocemos, especialmente para quienes podrían ser poco benévolos e incluso hostiles con nosotros. Esta apertura hacia los demás comienza en la familia, en nuestras casas, donde se aprende a conocer la misericordia y el amor de Dios. Y se expresa también en el cuidado de los ancianos y de los pobres, de las viudas y de los huérfanos.
Como aquella madre y sus siete hijos, que describe el segundo Libro de los Macabeos, se animaban unos a otros en el momento de la gran prueba (7,1-2.9-14), del mismo modo, como miembros de la familia de Dios, debemos ayudarnos unos a otros, protegernos y guiarnos a la plenitud de la vida. Pienso con gratitud en todos aquellos –Obispos, sacerdotes, mujeres y hombres consagrados y catequistas– que de mil modos diversos han ayudado a las familias cristianas. Que la Iglesia en este país, especialmente mediante las comunidades parroquiales, siga ayudando a las parejas jóvenes en su preparación al matrimonio, anime a los esposos a vivir el vínculo conyugal en el amor y la fidelidad, y ayude a los padres en su tarea de ser los primeros maestros de la fe de sus hijos.
Al igual que los Apóstoles y los mártires de Uganda antes que nosotros, hemos recibido el don del Espíritu Santo para ser discípulos-misioneros, llamados a salir hacia los otros y llevar el Evangelio a todos. En ocasiones esto supondrá ir hasta los confines del mundo, como misioneros en tierras lejanas. Esto es esencial para la difusión del Reino de Dios, y les pido siempre una respuesta generosa a esta exigencia. Sin embargo, no es necesario viajar para ser discípulos-misioneros. En realidad, solamente hace falta abrir los ojos a las necesidades que encontramos en nuestras casas y en nuestras comunidades locales para darnos cuenta de las numerosas oportunidades que allí nos esperan.
También en esto los mártires de Uganda nos indican el camino. Su fe buscó el bien de todos, incluso del mismo Rey que los condenó por su credo cristiano. Su respuesta buscaba oponer el amor al odio, y de ese modo irradiar el esplendor del Evangelio. Ellos no se limitaron a decir al Rey lo que el Evangelio prohibía, sino que mostraron con su vida lo que significa realmente decir «sí» a Jesús. Significa misericordia y pureza de corazón, ser humildes y pobres de espíritu, y tener sed de la justicia, con la esperanza de la recompensa eterna.
El testimonio de los mártires muestra, a todos los que han conocido su historia, entonces y hoy, que los placeres mundanos y el poder terreno no dan alegría ni paz duradera. Es más, la fidelidad a Dios, la honradez y la integridad de la vida, así como la genuina preocupación por el bien de los otros, nos llevan a esa paz que el mundo no puede ofrecer. Esto no disminuye nuestra preocupación por las cosas de este mundo, como si mirásemos solamente a la vida futura. Al contrario, nos ofrece un objetivo para la vida en este mundo y nos ayuda a acercarnos a los necesitados, a cooperar con los otros por el bien común y a construir, sin excluir a nadie, una sociedad más justa, que promueva la dignidad humana, defienda la vida, don de Dios, y proteja las maravillas de la naturaleza, la creación, nuestra casa común.
Queridos hermanos y hermanas, esta es la herencia que han recibido de los mártires ugandeses: vidas marcadas por la fuerza del Espíritu Santo, vidas que también ahora siguen dando testimonio del poder transformador del Evangelio de Jesucristo. Esta herencia no la hacemos nuestra como un recuerdo circunstancial o conservándola en un museo como si fuese una joya preciosa. En cambio, la honramos verdaderamente, y a todos los santos, cuando llevamos su testimonio de Cristo a nuestras casas y a nuestros prójimos, a los lugares de trabajo y a la sociedad civil, tanto si nos quedamos en nuestras propias casas como si vamos hasta los más remotos confines del mundo.
Que los mártires ugandeses, junto con María, Madre de la Iglesia, intercedan por nosotros, y que el Espíritu Santo encienda en nosotros el fuego del amor divino.
Omukama abawe omukisa. (Que Dios los bendiga). 

Evangelio según san Lucas 21, 34-36

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: Tened cuidado: no se os embote la mente con el vicio, la bebida y las preocupaciones de la vida, y venga aquel Día de improviso sobre vosotros, como un lazo; porque vendrá sobre todos los que habitan toda la faz de la tierra. Estad en vela, pues, orando en todo tiempo para que tengáis fuerza y escapéis a todo lo que está para venir, y podáis estar en pie delante del Hijo del hombre.
Oración introductoria
Señor Jesús, sé que tu Evangelio de hoy no tiene la finalidad de causar miedo o inquietud. Tú no estás esperando un momento de debilidad para llamarnos a juicio, al contrario, personalmente creo que llamas a cada persona en su mejor momento. Ilumina esta oración para que continúe con entusiasmo y confianza mi camino hacia la santidad: hacer lo que me toca hacer, siempre y todo por amor a Ti.
Petición
Señor, dame la gracia de la perseverancia final.
Meditación del Papa Francisco
Una pregunta está presente en el corazón de muchos: ¿por qué hoy un Jubileo de la Misericordia? Simplemente porque la Iglesia, en este momento de grandes cambios históricos, está llamada a ofrecer con mayor intensidad los signos de la presencia y de la cercanía de Dios.
Éste no es un tiempo para estar distraídos, sino al contrario para permanecer alerta y despertar en nosotros la capacidad de ver lo esencial. Es el tiempo para que la Iglesia redescubra el sentido de la misión que el Señor le ha confiado el día de Pascua: ser signo e instrumento de la misericordia del Padre.
Por eso el Año Santo tiene que mantener vivo el deseo de saber descubrir los muchos signos de la ternura que Dios ofrece al mundo entero y sobre todo a cuantos sufren, se encuentran solos y abandonados, y también sin esperanza de ser perdonados y sentirse amados por el Padre. Un Año Santo para sentir intensamente dentro de nosotros la alegría de haber sido encontrados por Jesús, que, como Buen Pastor, ha venido a buscarnos porque estábamos perdidos. (Homilía de S.S. Francisco, 11 de abril de 2015).
Reflexión
En nuestras vidas hay “sorpresas” que en realidad no lo son tanto. No debería sorprendernos que llegue así la cuenta mensual del teléfono, si hemos estado haciendo largas llamadas al exterior. Para quien se dedica a los estudios y no se ha dedicado responsablemente a ellos, es lógico que al llegar al examen “le sorprenda” lo difícil que es. ¡Era de esperar! Nosotros mismos preparamos y fraguamos estas sorpresas, que pueden resultar desagradables o negativas.
Pero sucede lo mismo en sentido positivo. Quien cumple su trabajo con profesionalidad, es emprendedor y tiene iniciativa, está “preparándose” una buena sorpresa, que puede ser un ascenso de puesto, más prestaciones, etc. De nosotros depende, entonces, que muchas situaciones del futuro sean buenas o malas.
Por eso, el Señor nos recomienda vigilar y orar; estar activos, construyendo nuestras vidas. Vigilar y orar para descubrir si estamos aprovechando al máximo el tiempo presente, ¡no vaya a ser que nos estemos preparando una sorpresa desagradable para el futuro!
Propósito
Prepararnos en el Adviento, orando y meditando para estar preparados a la venida de Jesús.

Iglesia en Centroamérica pide corredor humanitario para cubanos varados en Costa Rica

Los obispos de Centroamérica pidieron a los gobiernos de la región, así como de Colombia, Ecuador, México y Cuba, que establezcan un corredor humanitario para que los miles de cubanos varados en Costa Rica puedan llegar a Estados Unidos y acogerse a la Ley de Ajuste, para así poner fin a la crisis migratoria que enfrentan actualmente.
Costa Rica shuts down borders for Cubans en route to the United States pic.twitter.com/XQQAtim1yz
— Miami Herald (@MiamiHerald) noviembre 14, 2015
Los obispos hicieron este pedido a través de una carta que insta a los cancilleres a “propiciar el compromiso de sus Gobiernos para encontrar una inmediata solución a la crisis mencionada, mediante la creación de un corredor humanitario que permita el libre tránsito por sus países de las personas migrantes de nacionalidad cubana que pretenden llegar a Estados Unidos con el fin de acogerse a los beneficios migratorios de la Ley de Ajuste Cubano, así como de otras medidas que garanticen la seguridad de estas personas”.
El texto del 24 de noviembre señala que los cubanos estacionados “de forma creciente en Costa Rica tienen el anhelo de alcanzar el acceso al territorio estadounidense, pero que se han quedado varadas involuntariamente en este país, debido a que no existe, en estos momentos, una ruta internacional que garantice el libre tránsito hacia ese destino”.
En ese sentido, señalaron que su permanencia prolongada en albergues o a la intemperie, “afecta seriamente la calidad de vida de estos migrantes, especialmente de los más vulnerables, como son los niños y las niñas”.
Estas personas, indicaron, “han salido legalmente de su país con la debida documentación personal y no representan un problema para la seguridad de ninguno de los países de la región”.
Asimismo, recordaron la preocupación del Papa Francisco por los migrantes en todo el mundo y señalaron que “con buena voluntad y apego a los principios humanitarios y al respeto a los Derechos Humanos, es posible encontrar una solución eficaz a este problema”.
Los obispos dijeron que con un corredor humanitario se puede evitar también que estas personas caigan en manos de las mafias que “que se aprovechan de su vulnerabilidad cuando transitan por nuestras tierras como migrantes en situación irregular”.
Panamá cierra el paso de migrantes
Por su parte, a pedido de Costa Rica, el gobierno de Panamá detuvo el paso de migrantes cubanos que entran desde Colombia.
El canciller de Costa Rica, Manuel González, dijo que son “acciones que solicitamos a Colombia y Panamá para que también asuman su parte”. Según la prensa internacional, unos 600 cubanos esperan ingresar a Panamá desde la frontera colombiana.
Los migrantes cubanos inician su travesía por Ecuador, debido a que este país no les exige visa para ingresar. Sin embargo, debido a la crisis, el gobierno de Rafael Correa anunció ayer jueves que desde el 1º de diciembre se exigirá este documento a los ciudadanos cubanos con el fin de regular su entrada.


Papa Francisco: «El don del Espíritu Santo se da para ser compartido»

El papa Francisco en la colina de Namugongo –lugar del martirio de 22 laicos católicos que no quisieron apostatar de su fe– celebró este sábado la santa misa. Poco antes estuvo en oración silenciosa delante del altar que conserva las reliquias de San Carlos Lwanga, el más importante de los mártires ugandeses.
(Zenit) En el martirologio se lee: 
«San Carlos Lwanga y los doce martires con edad entre los 14 y 30 años, pertenecientesa a la corte real de los jóvenes nobles o a la guardia personal del rey Mwanga, neófitos o fieles seguidores de la fe católica, al rechazar seguir torpes pedidos del rey, en la colina de Namugongo en Uganda fueron algunos asesinados con la espada y otros quemados vivos en el fuego».
En su homilía el Santo Padre ha recordado que «desde la época Apostólica hasta nuestros días, ha surgido un gran número de testigos» por «amor por Cristo y su Iglesia». Recordó también «a los mártires anglicanos, su muerte por Cristo testimonia el ecumenismo de la sangre».
«Hemos recibido el Espíritu cuando renacimos por el bautismo» recordó el Papa, señalando que el «don del Espíritu Santo se da para ser compartido».
Señaló que los santos José Mkasa y Carlos Lwanga quisieron transmitir el don de la fe que habían recibido en tiempos difíciles. «No estaba amenazada solamente su vida, sino también la de los muchachos más jóvenes confiados a sus cuidados» y no tuvieron miedo de llevar a Cristo a los demás, aun a precio de la propia vida.

Papel de la familia

«Si, a semejanza de los mártires, reavivamos cotidianamente el don del Espíritu Santo que habita en nuestros corazones, entonces llegaremos a ser de verdad los discípulos misioneros de Cristo» dijo. Añadió que «esta apertura hacia los demáscomienza en la familia, en nuestras casas, donde se aprende a conocer la misericordia y el amor de Dios. Y se expresa también en el cuidado de los ancianos y de los pobres, de las viudas y de los huérfanos».
Por ello pidió a la Iglesia y en particular a las comunidades parroquiales que sigan «ayudando a las parejas jóvenes en su preparación al matrimonio, anime a los esposos a vivir el vínculo conyugal en el amor y la fidelidad, y ayude a los padres en sutarea de ser los primeros maestros de la fe de sus hijos».
Porque para ser misioneros no hace falta viajar sino «abrir los ojos a las necesidades que encontramos en nuestras casas y en nuestras comunidades locales para darnos cuenta de las numerosas oportunidades que allí nos esperan». Y en esto también los mártires de Uganda nos indican el camino.
Esta visión aseguró el Papa, «nos ofrece un objetivo para la vida en este mundo y nos ayuda a acercarnos a los necesitados, a cooperar con los otros por el bien común y a construir, sin excluir a nadie, una sociedad más justa, que promueva la dignidad humana, defienda la vida, don de Dios, y proteja las maravillas de la naturaleza, la creación, nuestra casa común».
El Pontífice concluyó pidiendo la intercesión de los «mártires ugandeses, junto con María, Madre de la Iglesia» y que el «Espíritu Santo encienda en nosotros el fuego del amor divino». Y concluyó «Que Dios los bendiga» pronunciado en el idioma local: ¡Omukama abawe omukisa!

viernes, 27 de noviembre de 2015

Familia, fanatismo, corrupción y cómo anunciar a Dios: el Papa se sincera con los jóvenes

 El Papa Francisco se sinceró con los jóvenes en el encuentro que mantuvo en el Estadio Kasarani de Nairobi. Dejando a un lado el discurso que tenía previsto leer, decidió improvisar sus palabras en respuesta a las preguntas que dos jóvenes le hicieron. La corrupción, el reclutamiento de jóvenes por el fundamentalismo religioso, cuál es el mejor medio de comunicación para anunciar a Dios y las heridas que sufren aquellos  que son abandonados por sus familias fueron los temas que abordó.
Divisiones, fanatismos y tribalismos
Francisco explicó que ya en la primera parte de la Biblia “un hermano mata a otro hermano”, refiriéndose a la historia de Caín y Abel. “El espíritu del mal nos lleva a la destrucción. Y el espíritu del mal nos lleva a la desunión, al tribalismo, a la corrupción, a la drogadicción, a la destrucción por los fanatismos”.
“Un hombre o una mujer pierde lo mejor de su ser humano cuando se olvida de rezar porque se siente omnipotente, porque no siente necesidad de pedir ayuda delante de tantas tragedias. Hay dos maneras de ver las dificultades: como algo que te bloquea, te destruye o te detiene o lo mirás como una oportunidad”.
El Papa recordó que “no vivimos en el cielo” sino en la tierra que “está llena dedificultades, está llena también de invitaciones para desviarte hacia el mal”.
Pero los jóvenes tienen “la capacidad de elegir qué camino quiero, cuál de estas dos cosas quiero elegir, dejarme vencer por la dificultad o transformar la dificultad en una oportunidad para vencer yo”.
Sobre el radicalismo religioso y como recluta a jóvenes que atentan contra lavida de los demás (por ejemplo el fundamentalismos islamista), el Papa señaló que primero “tenemos que saber por qué un joven lleno de ilusiones se deja reclutar o va a buscar ser reclutado y se aparta de su familia, de sus amigos, de su tribu, de su patria, se aparta de la vida porque aprende a matar”.
“Si un joven o una joven no tiene trabajo, no puede estudiar, ¿qué puede hacer?: o delinquir o caer en las dependencias o suicidarse” o “enrolarse en una actividad que le demuestre un fin en la vida, engañado o seducido”. Francisco sugirió que “lo primero que tenemos que hacer para evitar que un joven sea reclutado o quiera ser reclutado es educación y trabajo” porque “si un joven no tiene trabajo, ¿qué futuro le espera?”. “Y ahí entra la idea de dejarse reclutar. Si un joven no tiene posibilidades de educación, incluso de educación de emergencia, de pequeños oficios, ¿qué puede hacer? Ahí está el peligro”.
“Es un peligro social que está más allá de nosotros, incluso más allá del país porque depende de un sistema internacional que es injusto, que tiene al centro de la economía no a la persona sino al dios dinero”. Pero ¿cómo se puede ayudar a estar personas? “Primero rezar por él, pero fuerte, Dios es más fuerte que todo reclutamiento, y después hablarle con cariño, con simpatía, con amor con paciencia. Invitarlo a ver un partido de fútbol, invitarlo a pasear, a estar juntos en el grupo, no dejarlo solo”.
Sobre el tribalismo dijo que “destruye una nación”. “Es tener las manos escondidas por detrás y tener una piedra en cada mano para tirársela al otro”. El Santo Padre reconoció que “solo se vence con el oído, con el corazón y con la mano”.
“Con el oído, ¿cuál es tú cultura?, ¿por qué sos así?, ¿por qué tu tribu tiene estas costumbres? ¿Tu tribu se siente superior o inferior? Con el corazón. Una vez que escuché con el oído la respuesta abro el corazón y tiendo la mano para seguir dialogando”.
“Si ustedes no dialogan y no se escuchan entre ustedes siempre va a existir el tribalismo que es como una polilla que va a roer la sociedad”.
Corrupción
“Incluso en el Vaticano hay casos de corrupción”, dijo el Papa. “La corrupción es algo que se nos mete adentro, es como el azúcar, es dulce, nos gusta, es fácil y después terminamos mal y de tanto azúcar fácil terminamos diabéticos o nuestro país termina diabético”.
Para luchar contra ella “como en todas las cosas, hay que empezar, si no querés corrupción en tu corazón, en tu vida, en tu patria empezá vos. Si no empezás vos tampoco va a empezar el vecino”.
“La corrupción además nos roba la alegría, nos roba la paz, la persona corrupta no vive en paz”. “Chicos y chicas, la corrupción no es un camino de vida, es un camino de muerte”, subrayó.
Comunicar a Dios
Según el Papa, “el primer medio de comunicación es la palabra, es el gesto, es la sonrisa”. “El primer gesto de comunicación es la cercanía, es buscar la amistad”.
“Si hablan bien entre ustedes, se sonríen, se acercan como hermanos. Si ustedes están cerca el uno del otro aunque sean de diversas tribus y si ustedes se acercan a los que necesitan, a los pobres, enfermos, abandonados, al anciano que nadie visita, esos gestos de comunicación son más contagiosos que cualquier red de televisión”, respondió.
Tragedias de la vida
“¿Cómo podemos ver la mano de Dios en las tragedias de la vida? Esta pregunta se la hacen los hombres y mujeres de todo el mundo de una u otra manera. Y no encuentran explicación”, dijo el Papa.
“Más aún, hay preguntas que por más que te rompas la cabeza pensando no vas a encontrar explicación”. Pero el Santo Padre dijo que solo hay un camino: “Mirá al Hijo de Dios. Dios lo entregó para salvarnos a todos. Dios mismo se hizo tragedia. Dios mismo se dejó destruir en la Cruz. Y cuando estés que no entendés algo, cuando estés desesperado, cuando se te venga el mundo encima mirá la Cruz. Ahí está el fracaso de Dios. Ahí está la destrucción de Dios. Pero también ahí está un desafío  nuestra fe. La esperanza. Porque la historia no terminó en ese fracaso, sino en la resurrección que nos renovó a todos”.
Defender la familia
El Papa señaló que en todas partes hay chicos abandonados, por lo que “la familia es tan importante”. “¡Defiendan la familia!”, pidió.
Sobre las personas que han sido abandonadas dijo que existe un remedio para salir de ese dolor: “¡Hacer aquello que yo no recibí!”. “Si vos no recibistecomprensión sé comprensivo con los demás. Si vos no recibiste amor, amá a los demás, si vos sentiste el dolor de la soledad, acércate a aquellos que están solos. La carne se cura con la carne y Dios se hizo carne para curarnos a nosotros. Hagamos lo mismo nosotros con los demás”.

Iglesia católica pide redoblar seguridad RD

 El semanario Camino pidió a las autoridades redoblar la seguridad ciudadana, especialmente en estos días navideños, para que residentes y visitantes no sean víctimas de los delincuentes y atracadores.
El planteamiento del órgano escrito del arzobispado de esta ciudad aparecerá este domingo en su editorial que, con el título de “Esta es su tierra”, da la bienvenida a los dominicanos residentes en el exterior.
“Esperamos que las autoridades, en estos días, y ojalá que sea siempre, redoblen la seguridad ciudadana a todos los niveles, sobre todo en los trayectos desde los aeropuertos a las ciudades, para que ninguno de nuestros visitantes sea víctima de delincuentes y atracadores, como ha sucedido en años anteriores”, precisa.
Recuerda Camino que la experiencia vivida por los que llegan y son atracados, ha sido traumática y que la ilusión de venir a su patria y perderlo todo, incluso poniendo su vida en peligro, se convierte en una pesadilla.
Precisa Camino que los dominicanos que vienen en esta temporada, con esa decisión fortalecen su identidad caribeña “para estrechar la amistad y alimentar en estos días de vacaciones los valores que dan sentido a su existencia, y que enarbolan con orgullo en las diferentes naciones que los han acogido”.
Dice esperar que sea placentera la estadía de ellos en lo que denomina como la tierra de sus amores. “Los que vivimos aquí tenemos el deber de recibirlos con la calidez y hospitalidad que nos caracteriza”.

El Papa a los catequistas: «El vuestro es un trabajo santo»

El Papa Francisco dirigió un especial saludo a los catequistas y maestros de Uganda, la segunda nación africana que visita en este continente luego de Kenia, y les dijo que «el suyo es un trabajo santo». El coordinador nacional de los catequistas en Uganda agradeció al Papa su presencia y afirmó que «reunidos ante usted están los maestros, los catequistas y las familias. Es una bendición tenerlo en esta tierra santa». «Estamos muy agradecidos por la asistencia que va a dar a los catequistas. (…) Prepárenos para el trabajo de la misericordia», pidió.
(ACi Prensa) El Papa regó el llamado «árbol de la unidad», acompañado de un arzobispo anglicano en señal de amistad con las otras confesiones cristianas.
En Munyonyo y en medio de un gran ambiente de fiesta por su presencia, entre gritos como «Viva el Papa» y «Benvenuto Santo Padre», el Pontífice se dirigió a los presentes y afirmó que «aun cuando la tarea parece difícil, los recursos resultan insuficientes y los obstáculos demasiado grandes, les hará bien recordar que el suyo es un trabajo santo y quiero subrayarlo, el vuestro es un trabajo santo».
«El Espíritu Santo está presente allí donde se proclama el nombre de Cristo. Él está en medio de nosotros cada vez que en la oración elevamos el corazón y la mente a Dios. Él les dará la luz y la fuerza que necesitan. El mensaje que llevan hundirá más sus raíces en el corazón de las personas en la medida en que ustedes sean no solo maestros, sino también testigos».
Tras alentar a los obispos a darles a profesores y catequistas una «formación doctrinal, espiritual y pastoral que les ayude cada vez más en su acción», el Pontífice agradeció a los presentes «por los sacrificios que hacen ustedes y sus familias, y por el celo y la devoción con la que llevan a cabo su importante misión».
«Ustedes enseñan lo que Jesús enseñó, instruyen a los adultos y ayudan a los padres para que eduquen a sus hijos en la fe, y llevan a todos la alegría y la esperanza de la vida eterna. Gracias por su dedicación, por el ejemplo que ofrecen, por la cercanía al pueblo de Dios en su vida cotidiana y por los tantos modos en que plantan y cultivan la semilla de la fe en toda esta vasta tierra. Gracias especialmente por el hecho de enseñar a rezar a los niños y a los jóvenes».
El Santo Padre recordó que en Munyonyo fue donde el rey Mwanga decidió asesinar a los mártires ugandeses y cómo al haber entregado su vida al Señor, «los cristianos en Uganda creyeron todavía más en las promesas de Cristo».
«Que San Andrés, su Patrón, y todos los catequistas ugandeses mártires, obtengan para ustedes la gracia de ser maestros con sabiduría, hombres y mujeres cuyas palabras estén colmadas de gracia, de un testimonio convincente del esplendor de la verdad de Dios y de la alegría del Evangelio».
Al concluir el Papa exhortó a todos a ir «sin miedo a cada ciudad y pueblo de este país para difundir la buena semilla de la Palabra de Dios, y tengan confianza en su promesa de que volverán contentos, con gavillas de abundante cosecha».
Tras su discurso el Pontífice bendijo a los presentes y rezó brevemente ante una imagen de San Carlos Lwanga.

El Papa llega a Uganda

A las 5:06 p.m. (hora local), el avión que llevaba al Papa Francisco desde Kenia aterrizó en el aeropuerto internacional de Entebbe (Uganda), dando inicio a la segunda etapa de su visita apostólica al continente africano. Uganda es el primer país africano que ha acogido visitas apostólicas de tres pontífices.

(AciPrensa) Antes del papa Francisco visitaron el país el Beato Pablo VI, en 1969, y San Juan Pablo II, en 1993.
El principal motivo del viaje de Francisco a Uganda es el 50 aniversario de la canonización de 22 mártires ugandeses, ejecutados entre los años 1885 y 1887 por no renunciar a su fe.
Al descender del avión, el Santo Padre bendijo a unos niños que se le acercaron con regalos, para luego saludar a las autoridades civiles, políticas y militares reunidas en el aeropuerto. Con 21 disparos de cañón al aire, Uganda saludó la llegada del Papa.
Este país ha sufrido una guerra civil durante muchos años contra el grupo terrorista Ejército de Resistencia del Señor («Lord's Resistance Army»), causante de miles de muertes, esclavitud de niños y mutilación de personas.
Desde 1986 y reelegido en 2011 gobierna Uganda Yoweri Kaguta Museveni, que ha llevado relativa estabilidad al país, y ha liderado uno de los proyectos de reducción del VIH/SIDA más eficaces en el continente, promoviendo en primer lugar la abstinencia y la fidelidad.
Tras la ceremonia de bienvenida, el Papa sostendrá una visita de cortesía al presidente Museveni en la State House de Entebbe. Luego encabezará el encuentro con las autoridades y el cuerpo diplomático en el Salón de Conferencias de la State House.
En su última actividad de su primer día en Uganda, el Santo Padre realizará una visita a la zona de Munyonyo, donde se encontrará con catequistas y profesores.

Dos personas más detenidas en Bélgica por atentados París, una como testigo

 Dos personas más fueron detenidas ayer en Bélgica en el marco de la investigación que se desarrolla tras los atentados de París, una como sospechosa y otra como potencial testigo, confirmó hoy a Efe el portavoz de la Fiscalía federal belga, Eric Van Der Sypt.
El sospechoso fue detenido en Bruselas y prestará hoy declaración ante la jueza de instrucción que lleva el caso, mientras que el potencial testigo fue localizado en Verviers y no está claro de momento que tenga ningún vínculo con la investigación de los atentados, informa la agencia Belga.
La abogada de uno de ellos, Aurélie Jonkers, ha señalado que ambos hombres son hermanos.
Este jueves se produjeron en Bélgica nuevos registros en las localidades de Auvelais (sur) y Verviers (este), y según este medio, uno de ellos se habría producido en la casa de los padres de un individuo buscado por la justicia.
“Cuando mi cliente se enteró de que estaban realizando un registro en casa de sus padres, se fue allí y a su llegada al lugar fue inmediatamente detenido y esposado por la policía, sin haber verificado siquiera su identidad”, aseguró la abogada.
Según esta letrada, su cliente supo después que su hermano también había sido detenido, pero que no hizo declaraciones útiles.
“Mi cliente por el momento no ha sido puesto en libertad”, indicó.
La Fiscalía declaró este jueves tras los registros que no se habían producido detenciones, pero posteriormente la abogada Jonkers dijo a la agencia Belga que había al menos una persona “privada de libertad” en la operación de Verviers.
El portavoz del Ministerio Público dijo tras conocerse esta información que era “posible” que fuera así, en tanto se refiriese a un testigo o un arresto administrativo.
La información aportada hoy por la Fiscalía se situaría en esta misma línea.
Por el momento, no hay datos que confirmen que ninguna de estas dos personas ha sido puesta bajo mandato de arresto y que pesan cargos contra ellas.
Poco después de las operaciones de este jueves, el Órgano de Coordinación para el Análisis de la Amenaza (Ocam) anunció su decisión de rebajar un escalón el nivel máximo de alerta por riesgo de atentado terrorista en el que se encontraba Bruselas desde el sábado.
El paso del nivel 4 al 3 ha permitido hoy el funcionamiento normal del metro y las escuelas en la capital, aunque se mantiene la vigilancia reforzada con policía y militares en las calles por precaución.

El Papa planta un árbol en la sede de la ONU en Nairobi

El papa Francisco visitó ayer, como parte de su programa en Kenia, la sede de la Organización de las Naciones Unidas en Nairobi. El Santo Padre llegó al edificio y fue recibido por la directora general, la señora Sahle-Work Zewde. Después de firmar en el Libro de Oro, se dirigió al parque para plantar un árbol, como símbolo de la defensa de la creación, un «gesto simbólico y sencillo, cargado de significado en tantas culturas» dijo.
(Zenit) Llegado al nuevo edificio de la UNEP (United Nations Environment Programme), los presentes le recibieron con gran entusiasmo y aplausos. A ellos el Papa les recordó que en breve iniciará en París la cumbre COP21 sobre el clima, en donde espera se concluya un acuerdo global, basado «en los principios de solidaridad, justicia, equidad y participación».
Pidió así que la economía y política sean puestas al servicio de los pueblos, sin caer en la «globalización de la indiferencia, ni en las formas extremas de la cultura del descarte y de exclusión social», ni en las «nuevas formas de esclavitud, el tráfico de personas, el trabajo forzado, la prostitución, el tráfico de órganos».
El Santo Padre pidió además que «el proceso de urbanización se convierta en un instrumento para el desarrollo y la integración, a fin de garantizar a todos, condiciones de vida dignas».
Otro tema fueron los tratados de libre comercio regionales que «deberían ser un instrumento para asegurar un mínimo de atención sanitaria y de acceso a los remedios básicos para todos» y de seguir en el combate contra enfermedades como la malaria y la tuberculosis.
El Pontífice concluyó sus palabras indicando su esperanza en que la ayuda multilateral pueda dar un futuro seguro. «Lo será –concluyó– si los representantes de los Estados sabrán dejar de lado los intereses sectoriales e ideologías, y buscar sinceramente el servicio al bien común».

El papa pide educación y trabajo para evitar la radicalización de los jóvenes

El papa Francisco instó hoy a las autoridades a garantizar educación y trabajo a los jóvenes para evitar que se dejen "seducir" por los grupos violentos que les reclutan en el nombre de la religión.
El pontífice se despidió con este mensaje de Kenia en un encuentro multitudinario con jóvenes celebrado en un estadio, donde contestó a preguntas sobre "cómo evitar la radicalización" o "qué hacer contra la corrupción", problemas que preocupan especialmente a la juventud africana.
"Lo primero que tenemos que hacer es averiguar por qué un joven lleno de ilusiones se deja reclutar y se aparta de la vida, porque aprende a matar", reflexionó Bergoglio.
"Si un joven no puede estudiar ni trabajar, ¿qué puede hacer?: delinquir, caer en las dependencias (drogas), suicidarse o enrolarse, engañado o seducido, en una actividad que le demuestra un fin en la vida", señaló.
Las autoridades deben evitarlo proporcionando educación y trabajo, "porque sin esto no hay futuro", reiteró.
El papa también quiso contestar a un joven que le pidió consejo para acabar con la corrupción: "A diario tenemos que pagar una cantidad añadida para conseguir cualquier cosa, incluso en el colegio o en la universidad", lamentó el portavoz juvenil.
"Es algo que gusta tanto como el azúcar y que hace que nuestros países terminen diabéticos", subrayó el pontífice, quien advirtió de que el soborno -práctica extendida a todos los niveles en países como Kenia- "no es un camino de vida, sino de muerte".
"Cada vez que aceptamos un soborno destruimos nuestro corazón, nuestra personalidad y nuestra patria", apuntó Francisco, quien pidió a los jóvenes que "no le tomen el gusto a ese azúcar".
El pontífice recibió este baño de masas poco después del acto más modesto de toda su agenda en Nairobi, la visita al barrio marginal de Kangemi, donde compartió unos momentos con ciudadanos excluidos que tienen "un lugar preferencial" en su vida, como él mismo admitió.
El encuentro en el estadio deportivo fue una manifestación más de la festiva y colorista cultura africana: bailes, cánticos y rezos colectivos que sirvieron como último contacto al papa con la población keniana antes de partir hacia Uganda, segunda etapa del primer viaje que emprende a este continente.
En un emotivo gesto final, el papa pidió a todos los asistentes que se pusieran en pie y se agarraran de las manos para exclamar a una voz: "todos somos una nación". EFE

La insensatez MOPEC, Odebrecht y Acero Estrella

Es indiscutible que la construcción de nuevas vías para el tránsito terrestre ayuda al desarrollo de los pueblos. El carecer de ellas genera subdesarrollo. 
    
Actualmente está en su fase final la construcción de la prolongación de la avenida Hatuey que la alimentará con la Circunvalación Norte. No ignoramos que cuando se hace una nueva vía terrestre, genere como consecuencias no deseadas, trastorno vehicular, contaminación del medio ambiente, desvío del tránsito y de los peatones, pero es el precio que se paga si queremos desarrollo, agilidad en el tránsito,  y modernidad.
   
 El Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), tiene como misión construir y conservar las obras públicas necesarias, para el crecimiento económico sostenido del país, y sus valores son,  entre otros: desarrollo, calidad, respeto, honestidad, transparencia… Algunos de estos valores que enarbola dicho Ministerio distan mucho de la realidad. Según se nos ha informado, y así lo dicen las vallas,  las compañías constructoras de Acero Estrella y Odebrecht, son las responsables de esta obra de la prolongación avenida Hatuey.
    
Algunos lugareños nos hemos quejado ante las compañías constructoras y la misma MOPC, en el sentido que el último tramo de lo que era la avenida Hatuey ha sido reducido, de tal manera que solo puede desplazarse un solo vehículo y no dos. Las consecuencias, aparentemente no calculada por los ingenieros de la obra será taponamiento de vehículos, pues abría que esperar que se monte y desmonte el pasajero, o si el vehículo no puede continuar la marcha por desperfectos mecánicos, entonces los vehículos que están detrás deben dar reversa. De igual se le pidió – vía carta- el parqueo de la iglesia, y que la calzada se empalmara con la plazoleta de la iglesia, pero no nos hicieron caso. Es una pena que se haya impuesto la insensatez, es decir, la falta de buen juicio, prudencia y madurez antes de actuar.
    
Le pedimos a la MOPC, y las compañías constructoras que se re-planteen el diseño de la mencionada obra. Los que reclamamos no somos peritos en materia de ingeniería civil, pero en la escuela se nos enseñó física y matemáticas. Las palabras apocalípticas de la profecía de Daniel nos iluminan la vida presente: “…Lo que está escrito es, Contado, Pesado, y Dividido. “Contado”, quiere decir, nuestros días en esta tierra están contados, y hay límites señalado en la Palabra de Dios, excederse es tentar al Dios de la creación; “Pesado”, es decir, está pesado en una balanza, las obras buenas que hemos hecho, y también las malas; “Dividido”, o sea, si no somos buenos administradores de los dones de Dios, lo que tenemos como don, Dios se lo dará a otro. La cordura y la sensatez,  son dones que nos regala el Señor. Toda  obra buena, Dios la premia desde el cielo.
Felipe de Jesus

jueves, 26 de noviembre de 2015

¿Evangelizar con los deportes? Un Obispo maratonista explica cómo

- Como veterano maratonista que ha participado en 21 competencias, este Obispo en Estados Unidos explica el profundo vínculo que existe entre su fe católica y el deporte, y asegura que esta conexión puede incluso servir para evangelizar a los jóvenes.
“Si queremos que aspiren a una vida de santidad, tenemos que darle a los jóvenes buenos ejemplos de eso”, dijo a ACI Prensa el Obispo de Springfield en Illinois (Estados Unidos), Mons. Thomas Paprocki.
“Alguien tiene que ser un modelo a seguir no solo en términos de sus logros atléticos, sino también sus logros espirituales”, dijo.
“Y si tienes ambos, entonces eso es lo mejor de los dos mundos porque el joven va a mirar a ese atleta exitoso y decir ‘wow, esta persona es exitosa en su deporte. Y es también un creyente. Y si esa persona es un creyente, bien entonces quizás yo también puedo ser un creyente’”.
Mons. Paprocki es un atleta consumado a sus 63 años. Juega hockey recreacional, y ha completado 21 maratones en 21 años, consiguiendo 29 mil dólares en donaciones para caridad en sus dos últimas maratones.Su libro “Santas Metas para el Cuerpo y Alma” (“Holy Goals for Body and Soul”) aborda cómo Dios puede ser encontrado a través de la condición física y los deportes.
En octubre de este año, el prelado completó la Maratón de Springfield, y señaló que “probablemente correrá otra” para conseguir dinero para caridad con el grupo de corredores pro-vida “Life Runners”, en la Maratón de Filadelfia 2016.
Las maratones son realmente agotadoras, admitió, pero “dentro de un corto tiempo, nosotros (los corredores) tenemos ese escozor de volver ahí”. “Y lo describo como una adicción saludable”, señaló.
¿Qué es lo que mantiene a un maratonista a través del entrenamiento, particularmente a alguien que ha completado 21 maratones?
“Requiere llegar muy dentro de ti, tus recursos internos, para hacer eso”, dijo Mons. Paprocki, pues “todo está en desarrollar tu espiritualidad y confiar en Dios para que te ayude a usar los dones que Él te ha dado”.
Los deportes tienen un gran potencial para formar la cultura, explicó, y pueden ser tanto una herramienta poderosa para evangelizar, pero también una fuente de escándalo.
“Si queremos hablar a los jóvenes sobre Dios y la fe y la religión, si comenzamos diciendo ‘quiero tener una conversación contigo sobre Dios y la fe y la religión’, probablemente se van a desanimar o no van a estar interesados”, dijo.
En cambio, si la conversación comienza con un interés común como el hockey, correr o el baseball, continuó, “en el curso de esa conversación los introduces a algunos de estos temas relacionados con la espiritualidad y la fe, luego ellos comienzan a ver la conexión”.
Sin embargo, la actual cultura de los deportes no está libre de críticas, señaló, indicando a los escándalos de dopaje como una obvia deficiencia.
Mons. Paprocki advirtió que “hay también algunos problemas con lo que yo llamaría casi una idolatría con los deportes, o con ganar”.
El Prelado también criticó que esta idolatría se puede manifestar en ocasiones en que “adoramos a nuestros equipos deportivos al punto que preferiríamos ir a un juego de fútbol que ir a la Iglesia el domingo”.
Hay “tanto entusiasmo” en los eventos deportivos, indicó, que “pienso a veces que me gustaría ver ese entusiasmo por el Evangelio”.