La Iglesia Católica Dominicana celebró en grande ayer la Fiesta de San Pedro,
el inicio de los trabajos para la celebración de los 50 años de la Conferencia
del Episcopado Dominicano y la vigésimo octava Jornada de Jóvenes de Río de
Janeiro, en una ceremonia litúrgica que contó con la asistencia del presidente
Danilo Medina y la primera dama, doña Cándida Montilla de Medina.
La fiesta litúrgica, concelebrada por los obispos, el Nuncio Apostólico de Su Santidad y encabezada por el arzobispo metropolitano de Santo Domingo, el cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, se realizó en la Catedral Primada de América pasadas las cinco de la tarde.
Al pronunciar la homilía, el cardenal resaltó las cualidades del papa Francisco, a quien describió como un hombre sencillo, afable, con un estilo de vida llano “y sin mayor protocolo que la humildad y la verdad”.
“La Iglesia Católica siempre ha profesado amor, obediencia y fidelidad al Papa, a pesar de todas las contradicciones y crisis que a lo largo de la historia ha habido dentro de la misma Iglesia”, añadió.
En la misa, junto al presidente Medina estuvieron además el canciller Carlos Morales Troncoso, la ministra de Educación, Josefina Pimentel, los miembros del Cuerpo Diplomático y Consular y las hijas del jefe de Estado, Sibelly y Ana Paula Medina. Allí, el Cardenal bendijo a la comitiva de jóvenes que saldrá hacia Río de Janeiro, Brasil, en lo que constituyó un momento memorable del acto.
El Nuncio
El nuncio Jozef Wesolowski, aprovechó la ceremonia para agradecer al pueblo dominicano por las buenas intenciones con el papa Francisco.
“También la Iglesia dominicana entra en una perfecta sintonía espiritual con el Papa, quien nos ha exhortado desde los primeros días de su pontificado, a rezar por él”, dijo.
Manifestó que Su Santidad pretende de la Iglesia actos más espirituales que simples ceremonias y espera “de parte de esta querida nación dominicana, un momento de oración y de reflexión por sus intenciones”.
Antes de concluir el ceremonial una gruesa masa de jóvenes fue recibida por el Cardenal, quien los bendijo por el viaje que emprenderán hacia Brasil, donde todas las diócesis del país quedaron representadas para asistir a esa fiesta mundial de adoración juvenil y espiritual.
“En todo el mundo se está secundando en estos días la voluntad del Papa; las preparaciones mundiales de la juventud para la Jornada de la Juventud y estos muchachos se alistan para salir”, dijo el Nuncio.
La fiesta litúrgica, concelebrada por los obispos, el Nuncio Apostólico de Su Santidad y encabezada por el arzobispo metropolitano de Santo Domingo, el cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, se realizó en la Catedral Primada de América pasadas las cinco de la tarde.
Al pronunciar la homilía, el cardenal resaltó las cualidades del papa Francisco, a quien describió como un hombre sencillo, afable, con un estilo de vida llano “y sin mayor protocolo que la humildad y la verdad”.
“La Iglesia Católica siempre ha profesado amor, obediencia y fidelidad al Papa, a pesar de todas las contradicciones y crisis que a lo largo de la historia ha habido dentro de la misma Iglesia”, añadió.
En la misa, junto al presidente Medina estuvieron además el canciller Carlos Morales Troncoso, la ministra de Educación, Josefina Pimentel, los miembros del Cuerpo Diplomático y Consular y las hijas del jefe de Estado, Sibelly y Ana Paula Medina. Allí, el Cardenal bendijo a la comitiva de jóvenes que saldrá hacia Río de Janeiro, Brasil, en lo que constituyó un momento memorable del acto.
El Nuncio
El nuncio Jozef Wesolowski, aprovechó la ceremonia para agradecer al pueblo dominicano por las buenas intenciones con el papa Francisco.
“También la Iglesia dominicana entra en una perfecta sintonía espiritual con el Papa, quien nos ha exhortado desde los primeros días de su pontificado, a rezar por él”, dijo.
Manifestó que Su Santidad pretende de la Iglesia actos más espirituales que simples ceremonias y espera “de parte de esta querida nación dominicana, un momento de oración y de reflexión por sus intenciones”.
Antes de concluir el ceremonial una gruesa masa de jóvenes fue recibida por el Cardenal, quien los bendijo por el viaje que emprenderán hacia Brasil, donde todas las diócesis del país quedaron representadas para asistir a esa fiesta mundial de adoración juvenil y espiritual.
“En todo el mundo se está secundando en estos días la voluntad del Papa; las preparaciones mundiales de la juventud para la Jornada de la Juventud y estos muchachos se alistan para salir”, dijo el Nuncio.