Graça Machel, la viuda de Nelson Mandela, que patrocina una de las numerosas iniciativas para conmemorar el primer aniversario de la muerte del expresidente sudafricano, confesó que no logra acostumbrarse a su ausencia.
El ídolo de la lucha contra el apartheid en Sudáfrica falleció el 5 de diciembre pasado a los 95 años, después de una prolongada batalla contra la enfermedad.
Fue enterrado el 15 de diciembre en Qunu, la aldea donde pasó su infancia, en la provincia del El Cabo oriental (sur).
“Al acercarse el mes de diciembre, me siento más y más apesadumbrada”, reconoció Machel, nacida en Mozambique.
“Todavía es demasiado pronto para vivir con la realidad de que Madiba ya no está aquí”, agregó, refiriéndose al Premio Nobel de la Paz por su nombre de clan.
La muerte de Nelson Mandela fue recibida con una semana de duelo nacional en el país que él condujo desde la oscuridad del apartheid hasta la representación de la mayoría en el sistema democrático.
El aniversario de su deceso será conmemorado con numerosos actos.
Una marcha patrocinada por Machel tendrá lugar el sábado 13 de diciembre, gracias a una iniciativa de la provincia de Gauteng, que la organiza.
“Es una forma muy creativa de transmitir nuestra historia para que los más jóvenes continúen recordándolo”, destacó Graça Machel.