Julio Vasquez.

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domingo, 6 de noviembre de 2011

“Mateo fue el más querido por nuestros padres”




Cuando un amigo se va queda un espacio vacío. Esa es una estrofa de la conocida canción del cantautor y compositor argentino Alberto Cortez.Ayer, un gran hombre partió de este mundo: Mateo Rojas Alou.El ex-jugador fue sepultado en el cementerio Jardín Memorial en medio de llanto y dolor por parte de los presentes quienes rindieron un último adiós a uno de los miembros de la trilogía Alou.“Por ser el más travieso, era el más querido por nuestros padres. Fue siempre valiente y será el jugador más valiente con que he jugado, pero sobre todo fue un gran hermano”, dijo Felipe, quien tuvo a su cargo el panegírico momento antes de su cristiana sepultura. “Si de algo envidio a Mateíto era de que tenía muchos amigos”, agregó el hermano mayor de los Alou.Antes, en la funeraria Blandino, el presidente de la República, Leonel Fernández, destacó las cualidades de “Mateíto”.“La sociedad dominicana esta estremecida por el fallecimiento de Mateo Alou, siempre puso la bandera tricolor bien en alto en los terrenos donde participó”, afirmó el mandatario sobre el ex-jugador de las Grandes Ligas y los Leones del Escogido, quien falleciera el pasado jueves.
“Fue un hombre que tuvo muchos amigos”
“Mateíto nunca le hizo daño a nadie, fue un hombre manso. Fue un hombre que tenía muchos amigos”, expresó Felipe Alou. Mateo fue el tercero de seis hermanos que procrearon los señores José Altagracia Rojas y Virginia Alou de Rojas.