El genial actor se quitó la vida el lunes pasado. Su muerte conmovió a admiradores, colegas y políticos. La causa de su decisión fue la bancarrota, pero su mujer reveló un padecimiento hasta hoy oculto
El actor norteamericano Robin Williams, que se quitó la vida el lunes a los 63 años, sufría la enfermedad de Parkinson, anunció este jueves su esposa, Susan Schneider.
Williams "fue valiente mientras luchaba contra la depresión, la ansiedad y los primeros estadios de la enfermedad de Parkinson, de la que todavía no estaba preparado para hablar públicamente", explicó Schneider en un comunicado.
En la nota, la mujer recuerda que Williams "pasó mucho tiempo de su vida ayudando a otros", desde el "escenario, películas o la televisión". También señaló cuando el genial actor visitó a las "tropas en el frente, o confortó a un niño enfermo". "Robin quería que riéramos más y que sintiéramos menos miedo".