Willy, el padrino de La Ceiba Jayaco

Deybidania Rodríguez Navarro
Bonao
Con la completa seguridad de que el mandato de amar al prójimo como a uno mismo es un principio divino, el joven Willy Céspedes ha convertido esto en su norte y es por eso que diariamente realiza obras benéficas en honor a la comunidad que lo vio nacer junto a su familia, La Ceiba Jayaco.

Sin ánimo político, “porque no me interesa” asegura, este joven de apenas 31 años ha construido dos escuelas en su comunidad, beneficiando con esto a más de diez mil niños y niñas que antes desconocían el pan de la enseñanza.

Y es que a pesar de ser una persona que a diario trabaja para mantener su joven familia y a su madre viuda, Céspedes entiende que ayudar la infancia dominicana contribuye a erradicar el desmedro de nuestra sociedad. “No tengo fortuna, no soy rico, pero sé que otros pueden menos que yo y si Dios me da la oportunidad, por qué negarme”, alega.

“Me complace mucho contribuir al progreso social y educación de mi entorno. Soy feliz ayudando a mi prójimo”
Willy Céspedes, empresario oriundo de La Ceiba Jayaco.Divino Niño Willy, dueño del Almacén Céspedes, construyó las escuelas Divino Niño Jesús de la comunidad Caño Piedra y Ramón Matías Mella, de Charco Prieto.

De fe cristiana, el empresario es considerado por María Eduviges López, comunitaria de La Ceiba, como una demostración de que no todos los jóvenes delinquen y si ayudan a alguien es porque quieren tu simpatía no por pretensiones políticas.

La dama agregó que “cuando alguien muere de La Ceiba Jayaco, siempre los familiares apelan a la generosidad de Willy, porque ese no tiene un no en sus labios” Igual opinión tiene el coronel del Cuerpo de Bomberos de Bonao, Modesto Espinal, entidad que recibe el apoyo constante de este comerciante que a su vez estudia administración de empresas.

“El que sea tan entregado a su pueblo, sin fortuna que exhibir, lo hace simplemente ejemplar y admirable convirtiéndolo en un joven excepcional” dijo Espinal.

La Ceiba, Jayaco, es un distrito municipal de Monseñor Nouel que tiene tres escuelas, la única que no fue construida por Willy fue resultado de la lucha de su padre José Antonio.