La mujer cristiana condenada a muerte en Sudán por apostasía ha dado a luz a una niña en la prisión de Jartum, donde permanece retenida junto a su otro hijo, de 20 meses de edad. Meriam Yehya Ibrahim ha sido acusada de apostasía y de adulterio por haberse casado con un hombre cristiano, algo prohibido para las mujeres musulmanas. Un tribunal la condenó a muerte y a recibir cien latigazos por los dos delitos.
Un portavoz de la ONG, Manar Idriss, ha subrayado que «el Gobierno sudanés debe garantizar la seguridad (de Ibrahim) y la de sus hijos, incluido el recién nacido». Amnistía Internacional ha reclamado la libertad incondicoonal para la detenida, que ha dicho ser hija de padre musulmán y madre cristiana y haber sido criada en esta última religión.
Sin fecha para la apelación
Los abogados de Meriam Yehya Ibrahim presentaron un recurso la semana pasada para solicitar su liberación. Idriss ha admitido que no hay un plazo fijo para la resolución de estas peticiones, ya que aunque «habitualmente lleva meses», la Justicia sudanesa podría pronunciarse «mucho más rápido» por la atención mediática internacional.Amnistía Internacional ya ha recogido más de 700.000 firmas a nivel mundial para solicitar la liberación de Ibrahim.