El Gobierno ha puesto en marcha un novedoso proyecto que se denomina el Plan de Seguridad Ciudadana tendente a hacer más efectiva la lucha desigual que las autoridades libran para controlar el éxodo de la delincuencia que nos arropa en los actuales momentos.
Según los resultados arrojados en los primeros meses, la medida que abarca todo el territorio nacional y que ejecutan la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas no ha surtido los resultados esperados.
Se puede decir que una vez implementada la medida del Gobierno, las cifras de hechos delictivos han aumentado considerablemente, ya que tan y como había dicho anteriormente, el Plan de Seguridad Ciudadana debe de ir acompañado de una reforma policial profunda y de los recursos suficientes que esta institución necesita para implementarlo.
Esta vez los hechos delincuenciales han trascendido en perjuicio de comerciantes, artistas, militares de alto rango, a quienes ya no se le respeta ni sus uniformes.
Siempre he dicho que la vida la da Dios y él es que debe quitarla, pero en la actual coyuntura creo que el jefe de la policía lo está haciendo bien. Dios me perdone, pero que se puede hacer con un mozalbete drogado, pistola en mano, que agarra a una dama, un anciano, o a un militar, no importa su rango, lo atraca, le lleva todo su dinero y sus prendas, y luego se devuelve y le da un tiro para matarlo. Esto me da la impresión de que aquí lo que tenemos es una guerra en las calles y que por lo tanto las medidas excesivas de la policía y los cuerpos armados se justifican para preservar el orden público.
No obstante, todos estamos de acuerdo en que hay que perfeccionar la policía con una profilaxis para sacar las manzanas podridas, entre las cuales los hay desde chiquitos hasta los rangos más encumbrados de la institución. Aún así, la institución está luchando por hacer un buen trabajo y quiera Dios que así sea.
Actualmente, el Plan de Seguridad Ciudadana ha sido reforzado oportunamente por un contingente de 1000 guardias aportados el Ministerio de las Fuerzas Armadas con el interés expreso de reducir los actos delincuenciales. El Ministro de las Fuerzas Armadas almirante Sigfrido Pared Pérez tiene un personal exclusivo, que a la vez puede servir de equilibrio y vigilancia para mantener a raya no solo a los delincuentes civiles, sino también a muchos miembros de la Policía Nacional que viven de los delincuentes y que siguen dentro de la institución.
Tenemos tres instituciones fuertes y responsable enfrentando la delincuencia, Fuerzas Armadas, Policía Nacional y DNCD., ahora el otro frente en más complicado y profundo, y es que hay que emprender reformas de nuestras leyes que permitan al ciudadano serio y honesto diferenciarse de los infractores de las leyes, ya que cuando un hombre serio enfrenta a un delincuente que lo quiere atracar, le dispara y salva su vida milagrosamente, es apresado, sometido a la justicia y condenado, porque tenía que dejarse matar, o entregarle todo lo que tenía a este mal hechor. Mientras, por lo contrario, cuando un delincuente atraca y hiere a un ciudadano, una vez apresado la justicia lo pone en libertad para que vuelva a sus andadas.
El Gobierno tiene ahora que actual con prontitud para eliminar los otros factores que fortalecen y mueven la delincuencia, las drogas, los juegos ilícitos que regentea la Lotería Nacional, para robarle el dinero a las personas pobres y humildes, con unos números que son controlados desde la misma institución para favorecer y enriquecer a unas cuantas personas. Las Bancas deportivas y las maquinitas de diversión.
El Gobierno, si quiere tener éxito, tiene que cerrar todos estos negocios que se han convertido en un anstro de corrupción, y hacer una lotería más seria que retorne a sus orígenes, para ayudar con la medicina a los ancianitos y hacer un plan social que funcione a favor de los pobres y necesitados, para ganar la confianza otra vez del jugador, ya que la actual Lotería Nacional es una vergüenza y no merece tenerla un hombre como Danilo que lo está dando todo por su pueblo.
Espero que en los próximos días el presidente de la República, licenciado Danilo Medina, anuncie un plan de trabajos para ayudar a los jóvenes de nuestros barrios que echan los días y las noches en los billares, en los juegos de baraja, en las esquinas, o midiendo las calles de nuestros barrios, y esto también va a reducir notablemente la delincuencia.
Autor: JOSE GUERRERO M.