Julio Vasquez.

Radio Renacer

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miércoles, 19 de junio de 2013

Introducción a la biblia

El recorrer de espacios amotinados por seres pensantes, he encontrado no pocas veces el resurgir de la escena bíblica del apóstol Felipe y el etíope eunuco (Hch 8, 26-40). Al sentir la tanta “sed por Dios y su mensaje” y el poco entendimiento para comprender el mismo, me propongo emitir grosso modo un modesto esbozo sobre las Sagradas Escrituras.

La palabra Biblia significa Libros. Está dividida en dos grandes bloques: Antiguo Testamento y Nuevo Testamento; hay que señalar que la palabra Testamentum no tiene el mismo sentido que le damos hoy día, aquí esta palabra alude a Alianza. Así, pues, la Biblia es el conjunto de libros que nos hablan de la alianza que estableció Dios con Israel por medio de Moisés (antigua alianza) y que llevó a su plenitud en Jesucristo (nueva alianza).

El Antiguo Testamento es común a los cristianos y judíos (aunque los judío (seguidos por los protestantes) reconocen sólo los libros escritos en hebreo, o sea, 39; y los católicos añaden 8).

La Biblia de los judíos tiene tres partes: la Ley o Torá (que llamamos pentateuco); los Profetas o Nebiim; finalmente, los Escritos o Ketubim. Tomando las primeras letras de cada uno de los títulos (Torá, Nebiim, Ketubim), los judíos han formado la palabra TaNaK, que para ellos designa la Biblia.

El conjunto del Antiguo Testamento está escrito en hebreo, con algunas raras páginas en arameo. El Antiguo Testamento fue traducido al griego a partir del siglo III a. C. en Alejandría.

El Nuevo Testamento fue escrito totalmente en griego.

La Biblia no es un libro de historia, en ella se encuentran verdades de las experiencias vividas de un pueblo con su Dios. Su finalidad no es expresar unos hechos históricos, sino, una verdad de fe que se expresa en esos hechos narrados.

Para poder entender el mensaje transmitido, en toda su riqueza, bien ayuda saber en dónde, quién, cómo (forma literaria usada), a quién, el tiempo y las circunstancias que rodeaban el ambiente en el que se redactó el texto.

Géneros literarios más usados en la Biblia:

Los relatos: es necesario recordar el pasado para recordar a todos una mentalidad común. Al escuchar las historias de sus antepasados, se toma conciencia de pertenecer a la misma familia.

La epopeya. También se cuenta el pasado, pero se intenta sobre todo suscitar el entusiasmo y celebrar a los héroes, aunque para ello sea necesario adornar los pequeños detalles.

Las leyes: son las que organizan al pueblo y permiten una vida en comunidad.

La liturgia, celebraciones, ritos: expresan esta vida en común, como una comida de fiesta reúne a la familia. Los actos religiosos manifiestan la relación que se tiene con Dios.

Los poemas, los cánticos, los salmos: son la expresión de los sentimientos, de la fe del pueblo.

Los oráculos de los profetas: palabras solemnes que provienen de parte de Dios-hacen volver a la verdadera fe.

La enseñanza de los profetas, de los sacerdotes, puede hacerse de forma doctrinal, pero también pueden utilizarse relatos, historias (parábolas).

Los escritos de sabiduría. Son reflexiones sobre los grandes interrogantes humanos: qué es la vida, la muerte, el amor, por qué el mal, el sufrimiento…

Por Pbro. Ricardo José García Mejía.