Tras los disturbios provocados en Roma durante el frustrado
fallecido el pasado viernes, estaba el miércoles por la mañana en un aeropuerto militar de Roma, a la espera de transferirlo eventualmente a Alemania, su país de nacimiento.
Una ceremonia religiosa organizada por el movimiento católico ultraconservador lefebvrista el martes por la noche fue anulada.
"Nos vimos forzados a suspender el martes los funerales [religiosos] porque había un riesgo de que se conviertan en mitin neonazi", declaró el miércoles por la mañana a la prensa el prefecto de Roma, Giuseppe Pecoraro.
El prefecto dio la orden por la noche de transferir el cuerpo del ex capitán de las SS de Albano Laziale, una ciudad en las afueras de Roma, al aeropuerto militar de Pratica di Mare.
"Esperamos resolver este tema hoy. Estamos en contacto con Alemania", añadió Pecoraro.
"No soy yo quien debe decidir sobre la incineración o el lugar de entierro, pero estamos trabajando para resolver la situación de forma oportuna", añadió el prefecto de Roma.
Priebke murió el viernes pasado a los 100 años en su residencia de Roma, donde cumplía desde 1998 una condena a cadena perpetua por la masacre en 1944 de las Fosas Ardeatinas, que dejó 335 civiles muertos.
Incluso tras su muerte, Priebkesigue suscitando controversia, ya que ni la Argentina-donde vivió tranquilamente 40 años- ni Alemania -su país de nacimiento- ni Roma-donde vivió casi 15 años- quieren acoger sus restos.
Priebke, Una ceremonia religiosa organizada por el movimiento católico ultraconservador lefebvrista el martes por la noche fue anulada.
"Nos vimos forzados a suspender el martes los funerales [religiosos] porque había un riesgo de que se conviertan en mitin neonazi", declaró el miércoles por la mañana a la prensa el prefecto de Roma, Giuseppe Pecoraro.
El prefecto dio la orden por la noche de transferir el cuerpo del ex capitán de las SS de Albano Laziale, una ciudad en las afueras de Roma, al aeropuerto militar de Pratica di Mare.
"Esperamos resolver este tema hoy. Estamos en contacto con Alemania", añadió Pecoraro.
"No soy yo quien debe decidir sobre la incineración o el lugar de entierro, pero estamos trabajando para resolver la situación de forma oportuna", añadió el prefecto de Roma.
Priebke murió el viernes pasado a los 100 años en su residencia de Roma, donde cumplía desde 1998 una condena a cadena perpetua por la masacre en 1944 de las Fosas Ardeatinas, que dejó 335 civiles muertos.
Incluso tras su muerte, Priebke