Mons. Ignatius Ayau Kaigama, presidente de la Conferencia Episcopal de Nigeria, se ha referido a los enfrentamientos entre el ejército y Boko Haram: «Es un drama que sigue. Por desgracia, no es ninguna sorpresa que haya enfrentamientos en la zona y que un gran número de personas hayan perdido la vida. Lo que nos debería sorprender es que esta situación continúa sin solución aparente».
(Fides) Sobre la proliferación de armas cada vez más sofisticadas Mons. Kaigama expresa también su preocupación. «Como he dicho muchas veces tenemos que preguntarnos cómo llegan estas armas a Nigeria. Mientras que las más sofisticadas provienen del extranjero, en Nigeria existen laboratorios clandestinos que fabrican armas y artefactos explosivos improvisados», denuncia el arzobispo.
«Es un fenómeno preocupante, porque estamos asistiendo a una propagación de estos laboratorios clandestinos en las ciudades, pueblos y en los bosques en los que se construyen las armas ilegales. Todo esto debe detenerse lo antes posible», concluye Mons. Kaigama.
«Es un fenómeno preocupante, porque estamos asistiendo a una propagación de estos laboratorios clandestinos en las ciudades, pueblos y en los bosques en los que se construyen las armas ilegales. Todo esto debe detenerse lo antes posible», concluye Mons. Kaigama.
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