La Iglesia en Bolivia considera necesario un cambio de mentalidad en la sociedad «machista», y tolerante con el alcoholismo, como forma de combatir la violencia contra las mujeres, que registra altos índices en el país andino. En un mensaje hecho público este martes con motivo de la conclusión de la Conferencia Episcopal Boliviana, los obispos valoraron positivamente las nuevas leyes aprobadas para frenar la violencia «que daña especialmente a mujeres y niños».
«Pero consideramos totalmente necesario impulsar un cambio de mentalidad en nuestra sociedad, marcada por el machismo y la tolerancia al alcoholismo, y poner en marcha mecanismos de prevención, involucrando a la familia, a la comunidad educativa y a toda la sociedad», señala la misiva de los obispos.
La carta alude también a la «dramática realidad de los presos» en Bolivia y aprecia que el Ejecutivo aprobara a finales del año pasado un indulto masivo, tal y como había solicitado la Iglesia, para paliar el hacinamiento en las cárceles del país.
Los obispos piden que se intensifique esta medida, que se agilicen los procesos judiciales y que el Estado intervenga urgentemente «para mejorar las estructuras carcelarias y superar las condiciones inhumanas en las que viven los presos».
En diciembre del año pasado, cuando se aprobó la medida de gracia, había 13.840 internos en los penales bolivianos, casi 3.000 más que un año antes, según datos oficiales.
La Iglesia apeló también a que se supere en Bolivia «la instrumentalización de la justicia por intereses políticos y económicos, que ocasionan tantos sufrimientos a las víctimas».