Desde antes de la llegada de Jesucristo al mundo un sin numero de personas se han atrevido a hacer hasta lo imposible por llevar el evangelio a todos los lugares del mundo sin importar las adversidades que tengan que enfrentar cumpliendo de esta manera con la voluntad expresa del creador del mundo. Uno de estos ejemplos lo vemos en la persona del reverendo sacerdote Nestorio Agirembabazi, quien tiene a su cargo pastorear la parroquia St. Angela Merici, del condado del Bronx, que dicho sea de paso, es una de las más activas de la Arquidiócesis de Nueva York.
El P. Nestorio, como se le conoce en su parroquia es un digno representante en la tierra de nuestro Señor Jesucristo, es un hombre de una fe vibrante y una energia que contagia a sus feligreses. Su nacimiento se registra en el contienente africano, pero este siervo de Dios ha dejado a los suyos para llegar a tierras extranjeras y evangelizar a todos aquellos que pasan a su alrededor. Sus metodos son muy diferentes a los tradicionales y se refugia en aquellos impuestos por Jesucristo, siendo sus almas más fuertes; la humildad y la oración..
St. Angela Merici fue fundada en el Bronx, en septiembre de 1899 y desde entonces ha sido dirigida por 17 pastores, teniendo al frente desde el 2009 al reverendo P. Nestorio, quien reemplazó al P. Peter Mushi.
Sin embargo a pesar de que todos han realizado una labor brillante, en los hombros del P. Nestorio recae la responsabilidad de haber incrementado la membresia de la misma, y esto se debe en gran parte a su apoyo a los grupos que funcionan dentro de la misma. Otros aseguran que el exito de este buen pastor para guiar sus obejas es porque se deja llevar por el Espiritu Santo.
Sin duda alguna el reverendo P. Nestorio es un instrumento de Dios al servicio del hombre que se mantiene activo respondiendo a las necesidades de la Santa Iglesia Católica y representando por el mundo a los del continente de África..
Escrito por Julio Vásquez.
lunes, 13 de mayo de 2013
El P. Nestorio es un instrumento de Dios al servicio del hombre que acrecienta nuestra Iglesia.
6:08 p. m.
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