Palabras pronunciadas por la Licenciada Ingrid González de Rodríguez en graduación Escuela Yaque

Distinguidas personalidades de la mesa honor.
Señores miembros de la Junta directiva del patronato.
Señora Linda Read De Portela fundadora y presidenta del patronato de La Escuela Yaque de Orientación para la joven y demás autoridades académicas y administrativas.
Señores miembros de las Damas Fundadoras.

Agradezco el honor que se me concede al dirigirme a tan distinguido auditorio en esta tarde inolvidable, en la cual estamos de fiesta, celebrando con alegría el fin de un año escolar, los logros y metas correspondientes al año 2010- 2011, de los, y las estudiantes de la escuela Yaque de Santiago.

Nos hemos congregado en este histórico Salón Juan Pablo Duarte del Ayuntamiento Municipal, cumpliendo con una tradición de esta institución, que cada fin de año escolar reúne a sus graduandos, familiares y amigos.

Por este motivo pido la bendición de Dios para ustedes, afirmándolo como nuestro guía y salvador personal. Al momento de recibir formalmente el diploma que avala los conocimientos y enseñanzas recibidos.

Del mismo modo, destaco la digna aspiración de ustedes por superarse y crecer como seres humanos, y en base a la adquisición de los conocimientos y las destrezas necesarias para la práctica de una profesión u oficio dignos, puedan insertarse en la fuerza laboral del país, logrando el desarrollo integral, espiritual y material, que todos debemos alcanzar en la vida.

Los datos significativos tienen su valor, son imperecederos en la memoria ciudadana. Como institución pionera en la educación técnico- vocacional dominicana, cabe señalar los méritos que gracias al esfuerzo y la búsqueda continua de la excelencia, la Escuela Yaque de Santiago ha alcanzado en sus 49 años de labor, como espacio de realización personal y profesional para miles de mujeres, a las cuales, no sólo facilita conocimientos particulares y contingentes, sino también la formación y orientación, que trae consigo el mejoramiento de la vida humana.

Estos logros le han permitido numerosas distinciones, como por ejemplo, el reconocimiento de la Agencia Internacional para el desarrollo de los Estados Unidos (USAID) que la destacó como “Escuela Modelo para la lucha contra la pobreza en América Latina”.

Distinguidas y distinguidos estudiantes: El momento es propicio para pensar en el futuro que les espera. Son ustedes una fuerza viva, capaz de mover cualquier obstáculo y mirarlo desde el punto de vista positivo, como una oportunidad para crecer y ser mejores personas y profesionistas.

Les invito a mirar hacia el futuro con esperanza y fe en Dios, asumiendo valores que promuevan la lealtad, la honestidad, el respeto, la solidaridad, la justicia, el amor, y la paz, para guiar su propia vida e iluminar la de los seres queridos que les rodean.

Especialmente en el mundo de hoy, escenario de grandes cambios en las esferas sociopolíticas, económicas, filosóficas y culturales. Tenemos un desafío: pues parece olvidarse la dimensión del hombre espiritual y la importancia de la conquista de los valores para el mejoramiento de las actitudes en el hogar, el trabajo, y todos los ámbitos donde practicamos la experiencia de “vivir” y “ser” personas.

En este momento recordemos la trascendencia de los valores, esenciales para el desarrollo de una visión emprendedora, la chispa para descubrir ideas y oportunidades, visión necesaria para desarrollar los pequeños, medianos o grandes proyectos que ustedes sueñan, y que de seguro quieren realizar, y pueden causar gran impacto económico y social en la República Dominicana.

Se necesitan emprendedoras y emprendedores capaces de innovar, capaces de atreverse a crear y emprender con confianza, sus propios proyectos, venciendo sus miedos y temores, superando la pasividad y el conformismo con energía.

Cito como ejemplo de valentía, optimismo y entusiasmo a la fundadora de esta institución, la señora Linda Read De Portela quién en 1962 reunió a un grupo de amigas preocupadas por la situación socioeconómica de las mujeres del sector “La Joya” de Santiago, e inició el proyecto “Escuela Yaque de Orientación para la Joven”, en un local dónde operaba un prostíbulo.

Esa iniciativa nos ha demostrado que las grandes montañas se forman de pequeños granos de arena. Una idea emprendedora generó una acción positiva para las personas y la sociedad: El compromiso con la educación para obrar en consecuencia con sus convicciones fue la motivación inicial.

Hoy día la institución es una escuela modelo, un proyecto que alguna vez fue pequeño, y a la fecha ha graduado a más de cuarenta mil mujeres, cambiando su vida y la de sus familias, insertándolas en la fuerza laboral del país gracias al acceso a la educación, y la adquisición de una profesión técnica u oficio, por medio de la cual, ellas han asumido posiciones de liderazgo, convirtiéndose en agentes del cambio social.

Salgan triunfantes del reto que les plantea el mundo moderno ¡Trabajen con fe en Dios, dedicación y entusiasmo! Y prepárense cada día para un mejor desempeño. Sean ejemplo y luz para otros en la sociedad.

Con una visión emprendedora lograremos nuestras metas y alcanzaremos nuestros ideales.

Muchas gracias y buenas tardes