La República Dominicana propuso ayer que el diferendo entre Ecuador y el Reino Unido por el asilo diplomático al fundador de Wikileaks sea abordado bilateralmente mediante el diálogo y la negociación. Al hablar en la Reunión de Consulta de Cancilleres convocada por la Organización de Estados Americanos (OEA) para conocer de la controversia en el caso de Julian Assange, el canciller Carlos Morales Troncoso analizó la controversia a la luz del derecho internacional y desde una óptica pragmática. “No tenemos que proponernos que esta cuestión sea resuelta mañana o pasado mañana. Puede esperar que los mecanismos del diálogo y de la negociación se pongan en marcha y prosperen”, dijo. Un despacho de prensa explica que Morales Troncoso también consideró “la integridad física del asilado no corra peligro ni haya riesgo de hacer pedazos las inviolabilidades que establece la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas". “En su primera participación internacional como máximo representante de la diplomacia dominicana tras haber sido confirmado en su cargo por el Presidente Danilo Medina, Morales Troncoso proyectó una postura de sensatez y madurez en la diplomacia dominicana”, destaca la nota. Añade que en su intervención, el canciller no sólo reconoció la decisión de Ecuador, tras indicar que la República Dominicana la acepta y respeta “como un acto soberano de su gobierno”, sino también el surgimiento de la controversia por el hecho de que Gran Bretaña no incorpora a su legislación el derecho de asilo. Al analizar la divergencia, Morales Troncoso apuntó que los problemas derivados de las relaciones entre las naciones son generalmente complejos y nuestro mundo, contradictorio”. Dijo el ministro Morales Troncoso que “nuestras decisiones, en consecuencia, deben estar marcadas por el balance, por una apropiada mezcla de firmeza – firmeza en los principios que rigen el Derecho Internacional --, y contención –contención en las acciones y contención en las palabras”. Dejó establecido el apoyo de la República Dominicana a la vigencia plena de los principios establecidos en la Convención de Viena en lo que se refiere a la inviolabilidad de los locales diplomáticos.