Oscar Pistorius se salvó el jueves del cargo grave de asesinato, aunque una jueza determinó que sí fue negligente por matar a tiros a su novia Reeva Steenkamp y dejó latente la posibilidad de declararlo culpable por homicidio involuntario.
La jueza Thokozile Masipa dijo que el famoso corredor con las piernas amputadas fue negligente al disparar a través de la puerta de un baño en su casa en la madrugada del Día de San Valentín del año pasado.
En un momento dramático, paró de leer su veredicto y decretó un receso hasta el viernes, cuando se espera que emita el fallo formal de un juicio que duró seis meses y captó la atención de todo el mundo.
Pistorius todavía puede ser sentenciado a varios años de cárcel por homicidio involuntario. Aunque la jueza no anunció su veredicto, dijo que la fiscalía no demostró más allá de toda duda razonable que Pistorius es culpable de asesinato premeditado. Masipa también descartó el cargo menos grave de asesinato.
“Tengo la impresión de que el acusado actuó apresuradamente y con fuerza excesiva”, dijo Masipa sobre las acciones de Pistorius la noche del tiroteo. Pistorius, el primer atleta sin piernas que compite en unos Juegos Olímpicos, admitió haber disparado cuatro veces a través de la puerta cerrada del baño de su casa. Los balazos impactaron a Steenkamp en la cabeza, un brazo y las caderas, matándola en el acto.
El corredor de 27 años alega que la confundió con un ladrón, mientras que la fiscalía dice que su intención era matarla después de una pelea que fue escuchada por sus vecinos. Homicidio involuntario con arma de fuego usualmente conlleva una condena de cinco años de cárcel en Sudáfrica, pero la sentencia puede ser cambiada por un juez dependiendo de las circunstancias del caso. “Homicidio involuntario es un veredicto consecuente”, expresó Masipa.
La jueza señaló que “simplemente no hay suficiente evidencia” para llegar a un veredicto de asesinato premeditado. Pistorius lloraba quedamente mientras escuchaba a la magistrada, sentado en un banquillo de madera. Previamente la jueza había dicho que Pistorius podía permanecer sentado durante la lectura de los fundamentos hasta que le pidiera que se pusiera de pie para escuchar la resolución.
A continuación procedió a dar su evaluación de algunos de los 37 testimonios oídos durante el juicio, incluido el de Pistorius en su propia defensa. Masipa calificó a Pistorius de “muy mal testigo” que perdía la calma en el banquillo y en ocasiones se mostraba “evasivo”, pero subrayó que eso no significaba que era culpable de homicidio.
También puso en duda las declaraciones de algunos testigos que dijeron haber oído los gritos de una mujer, una parte crucial del argumento de la fiscalía.
“Ninguno de los testigos había escuchado al acusado gritar o llorar, menos aun cuando estaba angustiado”, dijo Masipa, en un aparente reconocimiento del argumento de la defensa que los gritos agudos escuchados eran de Pistorius al descubrir que había matado a Steenkamp.
“Sigo explicando por qué la mayoría de los testigos comprendieron mal los hechos”, dijo la jueza. Masipa dijo que descartaba los mensajes de texto entre Steenkamp y Pistorius sometidos como pruebas.
La fiscalía presentó mensajes de texto que demostraban la tensión entre ellos, en tanto los presentados por la defensa indicaban su afecto mutuo.
Esas pruebas no demuestran nada, dijo la jueza. “Las relaciones normales son dinámicas e imprevisibles la mayor parte del tiempo, en tanto los seres humanos son inconstantes”, señaló.
Pistorius podía ser condenado a entre 25 años y prisión perpetua si se lo hallaba culpable de homicidio premeditado por disparar a Steenkamp, una modelo de 29 años que también participaba en reality shows. Pistorius se declaró inocente, argumentando que creía que un intruso había entrado en su casa.