Solo para Mujeres.

Ya sabes que los hombres se excitan con los estímulos visuales. Lo que quizás no sepas es cuánto puedes elevar el placer de tu chico al explotar su innato deseo de recrearse la vista. “La conexión entre lo que ellos ven y la excitación sexual es una especie de reliquia evolutiva de los tiempos prehistóricos, cuando el primer hombre que ponía los ojos en una mujer disponible era el que copulaba con ella”, dice el sexólogo Robert W. Birch.
Menos mal que la forma de cortejar a una mujer ha progresado mucho desde entonces, pero el hombre aún responde primariamente a lo visual. Usa este hecho para erotizar cada instante de tu encuentro sexual: desde el jugueteo inicial hasta la acción principal. Comienza con estos tips expertos... y no olvides dejar la luz encendida.

Antes de irse al cuarto
● Deja que te vea en panty en la mañana: su testosterona está al máximo.
● Seductoramente retira con tu lengua un pedacito de comida que se haya quedado en tus labios o en tus dedos. El estará pensando cómo se sentirá tu lengua sobre su piel.
● Dirige su atención hacia tus puntos más sexy con alguna prenda, como un collar que te roce el busto o un top que le permita ver tu ombligo.
● Desvístete en otro cuarto, pero mantente al alcance de su vista. Creerá que está mirando algo prohibido.

En el jugueteo inicial
● Pon un espejo frente a la cama, siéntalo en una silla, colócate a horcajadas sobre él y bésalo apasionadamente. Ver la acción —además de la intoxicante vista de tu posterior desnudo— aumentará su deseo de ti.
● Agárrale la mano y guíala hacia tus puntos hot, pero mantén cierta distancia entre tú y él para que pueda verte la cara según te vas excitando.
● Colóquense en la posición del 69 tendidos de costado. Dile que apoye la cabeza en la parte interior de tu muslo y que disfrute el panorama.

Durante el acto
● Quédate con algo puesto, como la falda o los tacones, para darle a la acción un sexy sentido de urgencia.
● Mientras te mueves sentada sobre él, pásate las manos por todo el torso, apretando y uniendo tus senos para dar la impresión de un superbusto.
● Sentada sobre él, mirando hacia sus pies, abrázate con ambas manos y arquea la espalda echando hacia atrás la cabeza, de modo que tu pelo caiga sobre su pecho