La gente de la prensa de espectáculos está pasando por un mal momento.
No hay evento o actividad que se haga donde no surja una queja por mal trato a los comunicadores que son invitados a cubrir las mismas, situación que según se advierte se ha extremado en los últimos tiempos.
El último caso es el del concierto del cantautor Silvio Rodríguez en la Arena del Cibao, donde los periodistas fueron colocados en un tercer nivel de las gradas, a cosiderable distancia del escenario, donde para ver al artista había que usar binoculares, según el testimonio y las quejas de varios que estuvieron presentes.
Los organizadores del evento, el cual estuvo a casa llena, vendieron hasta el área VIP donde se suele colocar a la prensa, y zumbaron a los periodistas para las gradas en la parte atrás, según los quejosos.
Como ya saben, también hay quejas por disposiciones y limitaciones en la Alfombra Roja de los premios Casandra, hay quejas por el trato en el anfiteatro de Altos de Chavón, por las limitaciones en espectáculos en el Estadio Olímpico. En fin, que de acuerdo a opiniones de entendidos en el área,
nunca como ahora se había visto tanto irrespeto y menosprecio al trabajo de los periodistas criollos en los lugares que les sirven de fuente.
La conclusión a que se llega es que en el medio se le ha perdido el respeto a la gente de la crónica de espectáculos, a partir del surgimiento de una generación de comunicadores con una imagen y presencia muy débil, pues anteriormente, aunque a veces se producían acciones de irrespeto con contra de la prensa, los maltratos y la desconsideración no se podía considerar como algo recurrente como sucede ahora.
Hasta en Acroarte hay problemas con el trato que según se dice le dispensa la Cervecería a la entidad, que cada vez cuenta menos para algunas decisiones, tanto las que tienen que ver con el premio como con otras actividades.
José Tejada Gómez, quien es impulsado a un movimiento para que vuelva a la presidencia de Acroarte, admite que la institución luce debilitada, por lo que aspira a su rescate en caso de que definitivamente se decida por aspirar a colocarse al frente de la misma.
Otros sectores externos ven la situación de los cronistas de arte como una expresión de la crisis de valores que afecta a todo el entramado social y político de nuestra nación.
Y ustedes, villanos, como lo ven? Publicado por Joseph Caceres.
miércoles, 23 de marzo de 2011
Un trato muy villano a la prensa
11:11 a. m.