Julio Vasquez.

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miércoles, 26 de agosto de 2009

Padre e hijo son sepultados en medio del dolor y el llanto


Fueron sepultados ayer en la mañana en el cementerio de El Ingenio, en Santiago, en medio del dolor y las acusaciones familiares, los restos de José Ambiórix Germosén Díaz, de 36 años, y de su hijo José Germosén Durán, de 5, a quien el primero lanzó del puente Duarte de la capital, antes de tirarse desde el mismo lugar.

SANTIAGO. Fueron sepultados ayer en la mañana en el cementerio de El Ingenio, en medio del dolor, la angustia y las acusaciones mutuas de los familiares, los restos de José Ambiórix Germosén Díaz, de 36 años, y su hijo José Germosén Durán, de 5, a quien lanzó el lunes del puente Duarte de la capital, antes de tirarse del mismo lugar.

La madre del niño, Mirna Durán, insistió en acusar a los parientes del padre de su hijo de la tragedia, al señalar que ocultaban el lugar donde se estaba su vástago supuestamente raptado por su padre y llevado a Santo Domingo.

“Ellos sabían dónde estaba mi hijo y no me dijeron nada y por eso lo mató”, expresó en el camposanto previo al entierro, donde una y otra vez decía “yo soy la que debo estar en el ataúd y no tú, mi bebé”.

Además de José Germosén Durán, Mirna es madre de Karistina, de 16 años.

Mientras, los familiares de José Ambiórix Germosén Díaz responsabilizaron a la madre del niño de la locura cometida por su pariente.

Teodoro Germosén, dijo que Mirna Durán asediaba a su hermano, a quien “ manipulaba y humillaba”.

“Mirna no permitía que trabajara. Mi hermano era su perro, era su títere. Ella le puso una pensión y lo amenazaba que si no volvía con ella lo iba a meter preso”, expresó.

“Yo no justifico que se haya lanzado del puente con el bebé, porque eso es algo criminal sea quien sea que lo haga, porque no tiene que pagar por eso, pero creo que mi hermano cometió el hecho para no dejar al niño sufrir al lado de Mirna porque ella presenta una cara pero no es así”, explicó.

Niega secuestro. Teodoro afirmó que José Ambiórix decidió huir de su pareja donde una hermana en Los Ríos, en la capital, porque estaba desesperado por las presiones a que eran sometidos tanto él como y su hijo. Negó que su hermano haya secuestrado al niño como denunciara la madre. Los cadáveres de ambos se encontraron el lunes debajo del puente Duarte. Se dijo que Germosén cometió el crimen agobiado por problemas.

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