La Santa Sede informó este 26 de abril que el Papa ha nombrado a Mons. Juan de la Caridad García Rodríguez como nuevo Arzobispo de La Habana (Cuba), tras la aceptación de la renuncia por edad presentada por el cardenal Jaime Ortega Alamino.
(ACI Prensa) Mons. García Rodríguez es actualmente Arzobispo de Camagüey. En un comunicado, la Arquidiócesis de La Habana expresó su gratitud al Santo Padre por el nombramiento e informó que la fecha de posesión del nuevo arzobispo se anunciará en su momento.
«Junto a nuestros sentimientos de Acción de Gracias a Dios y gratitud al Santo Padre Francisco por este nombramiento, elevamos nuestras oraciones al Señor para que continúe derramando sobre Mons. Juan García, nuestro nuevo Pastor, los dones del Espíritu, que le ayuden a cumplir esta nueva misión que el Papa le ha confiado», señaló el Arzobispado de La Habana.
El comunicado, difundido en el sitio web de la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba (COCC), indicó que «el nombramiento de Mons. Juan García como Arzobispo de La Habana se produce luego de la aceptación por parte de Su Santidad el Papa Francisco de la renuncia que el Cardenal Jaime Ortega Alamino presentó el 18 de octubre de 2011 a Su Santidad elPapa Benedicto XVI, tal y como estipula el Canon 401 párrafo 1 del Código de Derecho Canónico, que establece la presentación de la renuncia al cumplir 75 años».
Asimismo, «testigos de la invaluable labor pastoral que el Cardenal Jaime Ortega Alamino ha desempeñado desde que el Santo Padre San Juan Pablo II lo nombrara Obispo de Pinar del Río en 1978, y luego Arzobispo de La Habana en el año 1981, expresamos nuestra gratitud al Sr. Cardenal por su docilidad a la acción del Espíritu Santo en el pastoreo de la grey a él confiada».
El Arzobispado informó que el purpurado establecerá su residencia en el Centro Cultural «P. Félix Varela», «donde, con la oración y su experiencia, continuará sirviendo a la Iglesia; además de las funciones que le son propias como Cardenal de la Iglesia al servicio del Papa».
El nuevo Arzobispo
Mons. Juan de la Caridad García Rodríguez nació en Camagüey el 11 de julio de 1948, en el seno de una familia sencilla –su padre trabajador ferroviario y su madre ama de casa– donde nacieron varios hijos.
Ingresó en el Seminario «San Basilio Magno» en El Cobre y concluyó su formación teológica en el Seminario «San Carlos y San Ambrosio» de La Habana (actual Centro Cultural P. Félix Varela), como parte del primer grupo que realizó todo el período de formación sacerdotal en Cuba. Fue ordenado sacerdote en 1972, cuando aún no había cumplido 24 años de edad.
Sus primeros años de ministerio sacerdotal los ejerció en la actual Diócesis de Ciego de Ávila, erigida por San Juan Pablo II en 1995.
El 15 de marzo de 1997 fue nombrado Obispo Auxiliar de Camagüey y recibió la ordenación episcopal en el Templo de la Merced en la ciudad de Camagüey el 7 de junio de ese mismo año, con la imposición de las manos de Mons. Adolfo Rodríguez Herrera, quien también lo había ordenado de presbítero. Su lema episcopal es: «Ve y anuncia el Evangelio».
A fines del año 1998 la Diócesis de Camagüey fue elevada al rango de Arquidiócesis. El 10 de junio de 2002, Mons. García Rodríguez asume como segundo Arzobispo de Camagüey.
Entre otros cargos, Mons. García Rodríguez fue presidente de la Primera Asamblea Nacional de Misiones celebrada en La Habana en 2006. Representó al Episcopado cubano en la V Asamblea General de Aparecida(2007) e invitó a Benedicto XVI a visitar a Cuba.
En febrero del 2007 fue nombrado miembro del Consejo Pontificio Justicia y Paz, celebró en 2008 la beatificación del Hno. Olallo Valdés e inició el proceso de beatificación de su antecesor, el Siervo de Dios Mons. Adolfo Rodríguez Herrera
Actualmente es miembro del Comité Permanente de la COCC y Presidente de las Comisiones Nacionales de Misiones y Familia. Representó al Episcopado en el Sínodo de la Familia en 2014.
En un comunicado divulgado por el Episcopado, se destacó la «sencillez de vida, entrega apostólica, oración, vivencia de la virtud» del nuevo Arzobispo de La Habana.
«De manera especial su sentido de fraternidad con los sacerdotes, tanto con gestos de gran comprensión, servicio y apoyo, como de autoridad discreta y firme. Indudablemente que, de acuerdo a la caracterización hecha por el Papa Francisco, se puede decir que quien ha sido nombrado Arzobispo de La Habana es un pastor que ‘huele a oveja’», expresó el comunicado.
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