Monserrate, quien se había declarado culpable de dos cargos de conspiración para cometer fraude el pasado 4 de mayo, pidió perdón por el crimen cometido en una declaración ante la jueza Collen McMahon y una sala llena de familiares, amistades y líderes de la comunidad.
Entre lágrimas mencionó que la sentencia afectaría a su familia, especialmente a su hijo adolescente autista y a su madre, quien fue diagnosticada con cáncer hace 18 meses.
A pesar que el abogado James Neuman pidió que lo sentenciaran a servicio comunitario, por su historial de ayuda a la comunidad, la jueza ordenó que el sentenciado se entregue el 11 de marzo de 2013, a las 2:00 p.m., para que comience a cumplir su condena.