El presidente de la Suprema Corte de Justicia (SCJ), Mariano Germán Mejía, dijo este martes que debe ser prudente ante el caso de los cinco jueces acusados por el Ministerio Público de cometer supuestas irregularidades en sus funciones.
Sostuvo que en momentos de muchas dificultades en la justicia hay que “saber callar”.
La aseveración del magistrado Germán Mejía se debe a la advertencia que algunos sectores de que está obligado a inhibirse cuando el Consejo del Poder Judicial conozca el juicio disciplinario contra los suspendidos jueces involucrados en casos de corrupción.
“Le agradezco mucho su insistencia, pero tengo que saber callar, no voy a emitir opinión, ya eso se deslucirá en los tribunales”, puntualizó Germán ante la preguntas de los periodistas durante el acto de lanzamiento de la Fundación Cierta, en la sede del Banco BHD León.
Se recuerda que el Consejo del Poder Judicial suspendió y envió a juicio disciplinario a varios jueces acusados por el procurador general de la República, de formar una estructura que alegadamente se dedicaba a manipular procesos judiciales y a negociar libertades de personas ligadas al crimen organizado, principalmente en las áreas del narcotráfico, lavado de activos y corrupción.
El procurador Francisco Domínguez Brito, señaló que partiendo de una investigación que han iniciado relativas a múltiples hechos de corrupción, se evidencia que esa presunta estructura estaba dirigida por Francisco Valera Arias, quien renunció la pasada semana del Consejo Judicial, así como de su función de juez del Cuarto Juzgado de la Instrucción de la provincia Santo Domingo.
Incluye además, a Awilda Reyes Beltré, jueza de la Cuarta Sala Penal del Distrito Nacional; Delio Germán Figueroa, del Primer Tribunal Colegiado del Distrito; José Duvergé Mejía, del Quinto Juzgado de Instrucción de la provincia Santo Domingo; Rosó Vallejo Espinosa, de la Cámara Penal de la Corte de Apelación de la provincia Santo Domingo, y Víctor Mejía Lebrón, juez de la Cámara Penal de Apelación de la misma jurisdicción.
La jueza suspendida de la Cuarta Sala Penal del Distrito Nacional, Reyes Beltré volvió ayer a negar las acusaciones que pesan en su contra y aseguró que no estampó su firma en un recibo por un supuesto soborno.
Germán Mejía afirmó en una rueda de prensa la semana pasada que la jueza Reyes le había confesado haber recibido el dinero para poner en libertad a un regidor acusado de mandar a matar a un chofer por el control de una ruta.
La suspendida magistrada, sin embargo, niega haber hecho tal confesión y también cuestiona la veracidad del recibo mostrado a través de medios de comunicación.
POR JACQUELINE MORROBEL
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