El jefe de la Policía, mayor general Manuel Castro Castillo, abogó para que las personas apresadas con armas de fuego ilegales sean castigadas con penas de prisión, sin fianza, como una forma de contrarrestar los asesinatos a manos de malhechores.
“Hay muchos delincuentes que son apresados y recobran su libertad, esos delincuentes son los que hacen uso indiscriminado de las armas a la hora de cometer sus despojos”, indicó.
Dijo que hoy sostendrá una reunión con el ministro de las Fuerzas Armadas, Sigfrido Pared Pérez, con el propósito de establecer las medidas necesarias para apresar y someter a la acción de la Justicia a las personas que portan armas de manera ilegal.
Asimismo, el jefe policial descartó que los asesinatos de por lo menos seis oficiales ocurridos en los últimos días obedezcan a un plan orquestado contra su gestión; indicó que se trata de “hechos delincuenciales fortuitos”.
Por otro lado, dijo que en agosto ampliarán el Plan de Seguridad Nacional para dirigirlo a otros sectores tanto en el Distrito Nacional como en provincias y comunidades en el interior del país.
Castro Castillo explicó que está realizando una profilaxis en la institución del orden.
“No vamos a tolerar el abuso policial, pero tampoco ningún tipo de inconductas”, apuntó.
Precisó que está trabajando en el fortalecimiento de la Dirección Central de Asuntos Internos de la Policía Nacional, con el objetivo de reforzar todas las investigaciones sobre las inconductas policiales, que incluyen la prueba antidoping, como una forma de prevenir que agentes policiales consuman narcóticos.
“Estamos trabajando en una línea clara, todos los miembros de la institución tienen que trabajar de manera íntegra y apegados totalmente a la ley”, manifestó el jefe policial.
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