Monseñor Agripino Núñez Collado calificó este martes como “una mancha para la Iglesia Católica” el apresamiento y sometimiento a la justicia en Bonao del sacerdote Alberto Cordero Liriano, a quien una juez le dictó tres meses de prisión preventiva como coerción por la acusación de violación a una adolescente de 15 años de edad. Definió el caso de penoso y lamentable que el sacerdote Cordero Liriano esté involucrado en una acción de violación a una menor. “Muy penoso y repudiable esta acción y sobre todo siendo un sacerdote, todavía es más lamentable. La iglesia deplora el hecho y los sufre también, porque es una especie de mancha a la iglesia misma”, consideró Núñez Collado. La jueza, Rosa María Almonte, del Juzgado de Atención Permamente, dictó la sentencia este martes y de inmediato lo envió a prisión. El cura Alberto Cordero Liriano se desempeñó como párroco de la parroquia Apóstoles Pedro Pablo, donde la adolescente fungía de auxiliar del religioso católico. En otro orden, el rector de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra exhortó a los productores de pollos y al Gobierno a buscar una solución consensuada al problema de la comercialización y precio de venta del pollo.