Día del Poder Judicial ¿luto o celebración?

Hoy miércoles 7 de enero celebramos el día del Poder Judicial, un día lleno de discursos, actos protocolares, cartas, publicaciones de anuncios pagados, ofrendas florales, etc. Pero detrás de todo este protocolo, cada día son más las voces que reclaman declarar este día como un día de luto y reflexión, en vez de uno de fiestas y celebraciones.

Han habido progresos. Es indiscutible. La Justicia dominicana que hoy poseemos ha superado algunos, no todos, de los retos que la limitaban a ser un “mercado de sentencias“, como le llamaban en el pasado. Sin embargo seguimos observando las mismas deficiciencias que se vienen criticando desde hace años. Seguimos viendo una Justicia arrodillada al Poder Ejecutivo, un Ministerio Público que vive a merced del poder político, una Policía Nacional que prefiere asesinar en alegados “intercambios de disparos” antes que llevar a los acusados a la Corte para que sean juzgados.

Seguimos viendo sentencias que dan ganas de llorar, que son una burla a la inteligencia y al sentido común. Los casos con un costo político siguen tomando años antes de ser resuelto, y muchos entran en un limbo del que no salen. Ejemplos hay de sobra. El más nombrado, y del que esperamos recibir explicaciones, es el sonado caso de la Sun Land, cuya sentencia desestimó los recursos de inconstitucionalidad en contra del expediente.

En el informe que el magistrado Jorge Subero Isa dará hoy sobre los logros alcanzados por el Poder Judicial durante el 2008 esperamos escuchar no las típicas estadísticas y cifras políticas. Queremos escuchar un plan detallado para superar todos estos retos del sistema de Justicia.

Como indicó la Finjus, “las reformas del sistema de justicia emprendidas en 1997 se han agotado en su contenido y comienzan a dar señales de involución”.

Queremos una Justicia que salga en los periódicos no por sus desaciertos, sino también por sus aciertos.