Un nuevo dominicano en el 30-30

El torpedero dominicano Hanley Ramírez se convirtió, el sábado, en el décimo pelotero latinoamericano que consigue 30 jonrones y 30 bases robadas en una misma temporada en las Grandes Ligas.
Ramírez, de los Marlins de Florida, pegó su trigésimo cuadrangular de la temporada en la segunda entrada del partido que su equipo ganó 4-2 a los Nacionales de Washington en Dolphin Stadium de Miami. Tim Redding fue la víctima del batazo, que encontró un compañero en circulación.
Ramírez, quien se ha robado 33 bases en el torneo, es el sexto dominicano y el décimo latinoamericano que logra la hazaña. Es además, el segundo jugador de los Marlins con un 30-30 en la historia de la franquicia (Preston Wilson lo hizo en el 2001).
Ramírez se quedó corto por un jonrón de lograrlo en el 2007, en su segunda temporada, cuando pegó 27 vuelacercas y robó 51 bases por segundo año consecutivo.
El jardinero dominicano Alfonso Soriano, de los Cachorros de Chicago, lidera a los latinos con cuatro 30-30 y es uno de cuatro jugadores que alcanzaron el 40-40 (el dominicano Alex Rodríguez, el cubano José Canseco y el norteamericano Barry Bonds son los otros) en la historia del juego.
Los dominicanos Vladimir Guerrero, Sammy Sosa y Raúl Mondesí y el venezolano Bobby Abreu lograron dos 30-30 cada uno.
Canseco fue el primer latino que al menos alcanzaba el 30-30, con sus 42 jonrones y 40 robos de la temporada de 1988 con Oakland. La hazaña lo impulsó a ganar el Jugador Más Valioso de la Liga Americana.
En 1993, Sosa fue el primer latino 30-30 de la Liga Nacional.