Lo injusto de la justica...Joven blanco culpable homicidio involuntario por asesinato de ecuatoriano

NUEVA YORK._ La justicia neoyorquina volvió a taparse un solo ojo.En la mañana de este lunes, el joven estudiante blanco de Long Island, Jeffrey Conroy, fue declarado culpable de homicidio voluntario por el atroz asesinato del inmigrante Marcelo Lucero ocurrido en noviembre del 2008 y considerado uno de los crímenes de odio (racial) más rechazados por la sociedad neoyorquina.

Jeffrey, quien al momento de cometer el homicidio estaba acompañado por varios compañeros de fechoría, quienes admitieron que salieron ese día en busca de cazar hispanos para matarlos, fue el único acusado de asesinato en el caso. La sentencia, lo enviaría a la cárcel sólo por ocho años de un total de 25 que contempla la ley por ese tipo de hecho.

Entidades comunidades del condado Suffolk, criticaron y rechazaron el dictamen, mostrando insatisfacción por el mismo. La mayoría esperaba una sentencia más severa, como cadena perpetua. El jurado absolvió a Conroy de homicidio premeditado tal y cómo ocurrió, cargo por el que sí hubiera enfrentado pena de por vida.

Activistas de la comunidad ecuatoriana dijeron que el fallo es discriminatorio y contradice el espíritu de la propia ley contra crímenes raciales del estado de Nueva York. Un hermano de Lucero, se mostró sereno y virtualmente conforme, pero no quiso comentar acerca del dictamen del panel integrado en su mayoría por hombres y mujeres anglófonos.

Conroy, de 19 años de edad admitió haber apuñalado a Lucero en el pecho cerca de la estación de trenes del poblado de Patchogue y luego cambió su versión alegando que se había incriminado para salvar a uno de sus amigos. La fiscalía dijo durante el juicio que Conroy y otros seis acompañantes, se dedicaron a agredir hispanos sólo por el odio a esa raza y el vil asesinato de Lucero fue la culminación de las persecuciones en medio de una campaña de odio racial.

Cuatro de los del grupo, se han declarado culpables de acusaciones conexas y dos de ellos esperan por sendos juicios. Conroy, es el único acusado por el asesinato del ecuatoriano, cuya muerte conmovió el mundo, generando el rechazo de la comunidad internacional.

Lucero, quien tenía 37 años de edad, había llegado a los 21 a Estados Unidos y estaba acompañado por un amigo cuando fue ultimado por Conroy, luego de ser brutalmente golpeado. Su amigo escapó milagrosamente al ataque y dio parte a las autoridades. El estudiante será sentenciado el 26 de mayo.