El Consejo Disciplinario del Ministerio Público destituyó este jueves a la fiscal de La Vega, Leiny Yolanda Rosario Solís, encontrada culpable de “proteger” a un presunto narcotraficante, cometiendo así faltas muy graves en el ejercicio de sus funciones.
En la acusación presentada por el Departamento de Inspectoría del Ministerio Público, que dirige el procurador adjunto Bolívar Sánchez, se detalla que la funcionaria impidió que miembros de la Policía Nacional de la Vega ejecutaran una orden de arresto contra Edwin Fernando Morillo Galán, y que se registrada el vehículo en el que se desplazaba dicho ciudadano, sobre el que existía la sospecha contenía un arma de fuego ilegal y drogas para una transacción, el pasado 5 de mayo de 2012.
Otro incidente ocurrió cuando esta se presentó el 11 de mayo pasado, a la dirección de asuntos internos de la Policía en Santo Domingo, en compañía de Morillo Galán, con la finalidad de denunciar un coronel, un capitán, y un primer teniente para impedir que se ejecutara una orden de arresto existente en contra del ciudadano con procesos abiertos en la jurisdicción de La Vega, entre ellos uno por asesinar a un agente de la policía.
A esto se le suma que utilizó su posición como fiscal para impedir que un primer teniente de la Policía conciliara con el ciudadano Morillo Galán, de quien se definió como amiga, en un proceso que este inició en su contra. Incluso la acusación le enrostra que utilizó la flota telefónica que le asignaron en su cargo para comunicarse con Morillo Galán, con quien supuestamente tiene una relación sentimental.
Se defiende
“Yo soy una persona honesta y que ha dedicado la mayor parte de su tiempo a estudiar y a prepararse, prueba de esto es que yo he realizado tres maestrías y diferentes cursos en diferentes partes del mundo, entonces yo entiendo que yo no he hecho absolutamente nada”, sostuvo, la exfuncionaria, tras negar que tuviera algún vínculo con el narco.
Agregó que llegará hasta el Tribunal Constitucional si es necesario pero nadie violará sus derechos. Se supo que la joven, de 32 años, tenía incluso un vehículo de lujo