El Secretario General de la Conferencia Episcopal de Chile (CECh), Mons. Cristián Contreras Villarroel, negó que los Obispos de esa nación apoyen el aborto terapéutico, como afirmaba el 17 de abril el diario chileno La Segunda en una noticia titulada «Obispos se abren a aborto terapéutico en caso de peligro de vida de la madre», algo que para Mons. Contreras contradice la postura de la Conferencia Episcopal de Chile.
(ACI) El Prelado no solo denunció el falso titular del diario sino que consideró la noticia como algo «triste desde una nostalgia del periodismo serio que el país necesita, sobre todo en estos tiempos».
El documento oficial de los Obispos chilenos ante al proyecto de ley que impulsa el gobierno de Michelle Bachelet para despenalizar el aborto señala que «el aborto nunca es terapéutico» y que «en ningún caso aporta sanación a dichas vivencias traumáticas».
Sin embargo el diario La Segunda informó que «la Conferencia Episcopal emitió una declaración en la que si bien lo rechaza se abre a aceptar una de las tres causales que contempla la iniciativa: cuando existe peligro de muerte de la madre».
Mons. Contreras escribió al director del diario y le expresó que «dudo que La Segunda titule gol en una noticia que confirma que aquel fue anulado. El pasado viernes, sin embargo, han incurrido en un error de esa envergadura, digno de análisis en talleres de redacción y comprensión lectora».
«Basta leer el primer llamado de la crónica para comprobar la falta de conocimiento o de comprensión de quien redactó el título contradiciendo el texto de la nota y ciertamente también de nuestro mensaje», señaló el Obispo.
Mons. Contreras explicó que «mal podríamos los obispos abrirnos a aquello que el titular denomina ‘aborto terapéutico’ cuando a renglón seguido la misma noticia aclara que ‘no constituye aborto la acción de suyo terapéutica para salvar la vida de la madre‘. Más adelante nuestro mensaje insiste, a prueba de cualquier duda, en que ‘el aborto nunca es terapéutico‘ porque en caso alguno aporta sanación a vivencias traumáticas».
«Permítame reiterarlo, esta vez usando una combinación distinta de palabras: nos abrimos a algo que busca sanar, que no mata; nos abrimos a algo que no es aborto», recalcó el Prelado, quien también expresó que se le dio a conocer el documento oficial de la CECh a la Segunda con cuatro horas de anticipación justamente para «evitar cualquier premura».
«Porque el lenguaje construye realidad, nos importa mucho que quienes escriben los titulares en su diario puedan darse el mínimo trabajo de leer la noticia que titulan y que conozcan el significado de las palabras que eligen», concluyó.
El documento de la CECh titulado «El derecho humano a la vida, una vida digna para toda persona» deja en claro que «no constituye aborto la acción de suyo terapéutica para salvar la vida de una madre en peligro, cuando no busca eliminar directamente la vida de la persona concebida, aunque su muerte sea una posibilidad prevista, aunque no querida o buscada».
«Si la creatura falleciera como consecuencia no deseada ni intentada, ni como fin ni como medio, de un procedimiento directamente orientado a sanar a la mujer en situación de grave riesgo, no se podría calificar de aborto» señalan los Obispos en el documento.