«Desde hace un año los fieles de mi parroquia y yo estamos sufriendo una persecución intensa por parte de los grupos políticos de socialistas, comunistas y nacionalistas, liderados por la alcaldesa Núria Marín del PSOE. Durante meses el Ayuntamiento está tratando de prohibir nuestras actividades religiosas y de piedad». Así de claro se expresa el P. Custodio Ballester, párroco de La Inmaculada Concepción en Hospitalet de Llobregat (Barcelona).
(InfoCatólica) Texto completo del sacerdote español y catalán publicado como «alerta» en HazteOir:
Soy el padre Custodio Ballester, párroco de La Inmaculada Concepción y vecino de L’Hospitalet de Llobregat (Barcelona). Desde hace un año los fieles de mi parroquia y yo estamos sufriendo una persecución intensa por parte de los grupos políticos de socialistas, comunistas y nacionalistas, liderados por la alcaldesa Núria Marín del PSOE. Durante meses el Ayuntamiento está tratando de prohibir nuestras actividades religiosas y de piedad.Hace unos meses nos obligaron a caminar, casi en fila india por estrechas aceras, por nuestras calles tras la prohibición de la procesión de la Virgen de Gracia de Carmona. Quisieron impedir nuestra procesión de Viernes Santo del Cristo de la Buena Muerte escoltado por la Hermandad de Antiguos Caballeros Legionarios de Barcelona. Los fieles resistieron a la prohibición convocando una manifestación civil donde participé con mi sotana acompañando a Jesús en el día de su muerte en Cruz. Este acoso va creciendo día a día. Los políticos laicistas casi nos tienen acorralados y las personas más mayores de mi parroquia tienen miedo.Quieren impedir que manifestemos públicamente nuestra fe en Jesucristo. No se han conformado con sus amenazas políticas y maniobras oscuras. Van a por todas, y quieren recluirnos en nuestras casas y cerrar esta parroquia compuesta por cristianos humildes y muy ejemplares. Hace unas horas en el Ayuntamiento se ha celebrado “un juicio político”, sin posibilidad de defensa, donde han aprobado una moción requiriendo a la justicia y las autoridades que nos investiguen por invitar a “personas armadas” a nuestras procesiones, aludiendo a los legionarios veteranos que escoltaban al Cristo de la Buena Muerte. Además quieren echarme de mi parroquia y de la ciudad. Exigen a las autoridades de la Iglesia Católica que cancelen nuestra misión pastoral.Te pido que me ayudes a defender mi parroquia y a que en L’Hospitalet continúen las procesiones católicas y cualquier manifestación pública de nuestra fe. Que se garantice nuestra libertad religiosa y el derecho a expresar nuestra fe en nuestras iglesias y en nuestras calles. Exige el cese de esta persecución y una rectificación de la alcaldesa del PSOE Núria Marín.