Todo ser humano, desde su concepción, tiene derecho a nacer, es decir, a vivir su propia vida. No sólo el bienestar, sino también, en cierto modo,el ser mismo de la sociedad, dependen de la salvaguardia de este derecho primoldial. Si se niega al niño por nacer este derecho, resultará cada vez más difícil reconocer sin discriminaciones el mismo derecho a todos los seres humanos.
martes, 27 de mayo de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 Comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.