Durante un recorrido encabezado por autoridades del penal en las instalaciones, fueron mostradas 13 unidades de aires acondicionados y nueve parábolas (dos de una empresa de telecomunicaciones y siete de telecable) colocadas sobre el techo de las celdas “de especiales”.
Además, había cuatro paneles solares, varias unidades de tinacos, así como calentadores y filtros de agua. La lista de “privilegios” es completada por un tanque de gas licuado de petróleo (GLP) para cocinas particulares y varios inversores con sus baterías.
Los guías de la visita mostraron, en contraste, las áreas que acogen a los presos comunes y que son conocidas por ellos como “Los Sancristobaleros” y “Los Veteranos” apenas cuentan con un “enjambre” de antenas hechas de perchas y trozos de alambres que son sostenidas por tubos PVC.
Otras diferencias. Existen otras diferencias entre los reclusos del penal, que fue construido en el 1990. Mientras algunos son mantenidos en celdas personales, otros son colocados en espacios hacinados junto a más de 30 internos.
Por ejemplo, el área “de presos comunes” es habitada por 3,322 privados de libertad, lo que casi triplica su capacidad real.
Se explicó que estos también son llevados a celdas de castigo, cada vez que se “portan mal” y que se involucran en discusiones y pleitos. Unos 15 son llevados a las pequeñas casetas al sol cada día.
Explicaron que en el penal se retiraron algunos equipos de aire acondicionado, pero del Área de Extraditables, como lo confesó Yván Miguel Tineo Paulino, quien es requerido por los Estados Unidos por varios cargos de narcotráfico.
Al ser cuestionado por periodistas que lo avistaron en su celda del segundo piso, Tineo Paulino se echó palmadas de aire en la cara con sus manos, en señal de que sufría por el calor.
Representantes de varios medios de comunicación fueron invitados por la Procuraduría General de la República a recorrer el penal, con el objetivo de constatar la eliminación de “privilegios” del área “de conyugales”.
Sin embargo, mientras esperaban por más de una hora y media la llegada del director de Prisiones, mayor general Tomás Holguín La Paz, encontraron que la medida no había alcanzado otras áreas del recinto.
“Un proceso por etapa”. Al ser preguntado por los periodistas, el director de Prisiones indicó que la orden del Procurador será acatada mediante un “proceso lento y por etapa”.
“Si usted le pone a un enfermo un suero a todo lo que da se va a morir y no se va a sanar”, indicó Holguín La Paz, para justificar que el desmonte será en etapas.
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Eliminan conyugales
