Es cierto que esta sociedad de hoy, es poco lo que puede ofrecer a los que van subiendo, a los niños, niñas y jóvenes. Tienen la ventaja de que ahora manejan un flujo de información bastante grande pero a la vez, es un problema si esa data no se sabe manejar adecuadamente, o no se tiene control sobre ella o lo que recibe el joven.
Los parámetros que se le muestran a la juventud de hoy, es todo basado en lo fácil, en lo rápido y menos elaborado, por eso vemos como en el ámbito de la música se escucha mucho sonido y poca letra, asimismo poca calidad. Se le está dado como ejemplo lo que ve, en una sociedad donde no hay orden ni respeto a nada, fuera de lo que observa en la casa , siempre y cuando el hogar de dónde proviene sea adecuado y regido en normas. Hoy se le muestra al joven que lo importante es llegar, sin importar el medio, con tal de alcanzar el fin deseado. Por esto vemos líderes deportivos, que utilizan todo tipo de sustancias o llevan una vida poco digna, porque lo que tratan es de conseguir los resultados al precio que fuere.
En el caso de los políticos, llevando esta ciencia a la forma más baja con tal de justificar su ascenso y riqueza personal, son la gran mayoría que no le da escozor tener que perder la dignidad y el respeto por su mal accionar, con tal de conseguir el fin buscado.
En el caso profesional, no son muchos los que reciben como pauta y norma que deben aplicar un esfuerzo y un trabajo, tesonero y constante, con muchos sacrificios en el camino. Lo que le ven y algunos mal aprenden, es que deben obtenerlo todo en poco tiempo y a como de lugar. Olvidan que deben unirse la honestidad, la responsabilidad, la ética, y la disciplina con la capacidad. De nada te vale ser muy capaz intelectualmente, sino tienes escrúpulos para conseguir y obtener los logros en tu carrera. Si tienes que engañar, estafar, o romper y guardar la moral. ¿De qué te vale pagar ese precio tan alto, si en el camino mismo te manchas por siempre? ¿De qué te vale vivir perdiendo el respeto propio y en los demás, por obtener lo que deseas a cualquier precio?
Por eso no es cierto que "el fin justifica los medios"; dentro de esto son muchas las salidas que estarían a la mano y no se corresponden con la respuesta que nuestra conciencia y Dios sean capaces de acoger para vivir en paz. No dejemos que sea la desesperación y la impotencia, ante las caídas o caminos no esperados por nosotros, los que definan nuestras respuestas ante la vida y en nuestra actitud. Porque siempre que se presenten le querremos dar la salida fácil, cobarde e inadecuada.
Este medio social ofrece de todo para que caigas en la mediocridad, apañes el desorden y te sometas al “hacer y dejar hacer a toda costa”. Es por ello que hoy es más fuerte y comprometedor el trabajo y la educación de los hijos e hijas por parte de los padres y madres en los hogares, para evitar que sigamos contribuyendo a un medio de tanta podredumbre.
Lic. Jordi Veras.