Por Tony Brito
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Bonao.- Tres Jueces del Tribunal Colegiado de la Cámara Penal del Juzgado de Primera Instancia de Monseñor Nouel repartieron ochenta y cinco años a cuatro personas autores de un triple crimen ocurrido aquí el pasado domingo 19 de diciembre del 2010.
Los jueces doctores Adolfo Yarid Ureña, Nelson Langoma y Yudelka López de la cruz condenaron anoche a 30 años de prisión a Juan Manuel Torres Zapata (Samuelito) de 22 años y Paúl Rodríguez Bencosme por ser los autores del triple asesinato ocurrido aquí el 19 de diciembre del año 2010, en la calle Restauración número 24 contra una pareja de esposos comerciantes y su nieto de 8 años.
Asimismo fueron condenados, José Rafael Ramos Olivo (Rafelito) a 15 años de prisión y a Natanael Torres Zapata a 10 años, éstos dos últimos como cómplices del triple asesinato. Estas personas fueron los responsables de asesinar de varias puñaladas a la pareja de esposo conocido como Julián Núñez, de 71 años; su esposa Elena Pelagio Batista, de 58, y su nieto Joan Manuel Núñez Maceo, de 8, hecho que consternó a Bonao hace dos años.
El hecho de sangre causó gran indignación en la provincia y el país, por la forma salvaje como estos cuatro individuos mataron a cuchilladas a la pareja de esposo y a su nieto cuando dormían en su vivienda.
Julián Núñez y su esposa Elena Batista, eran propietario de Casa Núñez y gozaban de gran respeto y admiración por ser dos personas de respeto y de trabajo en Bonao.
Los tres condenados por el triple crimen lo acusaron de haber violados los artículos 265, 266, 267, 295, 296, 304, 379, 382, 384 y 385 dl Código Penal, además los artículos 49 y 50 de la Ley 36 sobre Comercio, Porte y Tenencia ilegal de armas de fuego.
Los jueces del Tribunal al dictar la condena dijeron que estas personas son acusadas de asociación de malhechores, asesinatos, robo de noche en casa habitada ejerciendo violencia y porte y tenencia de armas de fuego y complicidad.
Por el Ministerio Público subieron al Estrado el fiscal José Luís Farías Mosquea y Santo Isidro Fabián Beltré. La población estuvo muy conforme con la condena emitida por los jueces a estos cuatro asesinos.
Los cuatros condenados fueron trasladados de madrugada a la cárcel de Cotuí a pulgar sus penas por un contingente policial ya que una multitud frente al tribunal quería lincharlos luego que los jueces los condenaran. La gente solo clamaba justicia.