El Papa ha propuesto la elaboración de películas y transmisiones televisivas y radiofónicas sobre la fe «accesibles a un público amplio» y encuentros con no creyentes que «buscan con sinceridad el sentido último de la existencia» como algunas de las iniciativas del Año de la Fe, que dará comienzo el próximo 11 de octubre, en el aniversario del Concilio Vaticano II. En una nota de la Congregación para la Doctrina de la Fe, el Santo Padre ha recogido una serie de indicaciones de cara a ese periodo que concluirá el 24 de noviembre de 2013.
(EP) Benedicto XVI ha incluido recomendaciones tanto para el ámbito de la "Iglesia universal" como para las conferencias episcopales, las parroquias y asociaciones o el ámbito diocesano. Para el Papa, el principal evento será la XIII Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos, sobre 'La nueva evangelización para la transmisión de la fe cristiana', en el mes de octubre de 2012 y será durante el sínodo cuando se dará inicio "solemnemente" al Año de la fe.
Entre sus iniciativas, se incluye la importancia de promover tanto transmisiones televisivas o radiofónicas como películas y publicaciones "incluso a nivel popular y que sean accesibles a un público amplio" sobre el tema de la fe. En este sentido, ha reiterado la necesidad de "alentar la participación" del mundo académico y de la cultura "en un diálogo renovado y creativo entre fe y razón", a través de congresos y jornadas de estudio.
Asimismo, pide "promover encuentros" con los no creyentes que "buscan con sinceridad el sentido último de la existencia y del mundo". El documento también recoge la necesidad de fomentar las peregrinaciones de los fieles a Ciudad del Vaticano. Además, entre otras propuestas, también se recomiendan simposios congresos y reuniones "de gran escala, que favorezcan la comunicación de auténticos testimonios de la fe", de cara a la celebración de la próxima Jornada Mundial de la Juventud de Río de Janeiro, en julio de 2013.
De las indicaciones en el ámbito de las Conferencias Episcopales, ha pedido favorecer la reedición de los Documentos del Concilio Vaticano II, del Catecismo de la Iglesia Católica y de su Compendio, y ha propuesto aprovechar los nuevos lenguajes de la comunicación de modo de hacer accesible a un público amplio, el tema de la fe.
Por último, en el ámbito de las parroquias, comunidades y asociaciones ha reiterado la necesidad de promover misiones populares y otras iniciativas en las parroquias y en los lugares de trabajo, para ayudar a los fieles a "redescubrir el don de la fe bautismal y la responsabilidad de su testimonio".