La brecha entre ricos y pobres esta mas grande que nunca en las grandes economias, sobretodo despues de la ultima gran crisis del sistema financiero internacional. Y en los paises sub-desarrollados, tercermundistas, ni que decir. Es la verguenza del continente donde el crecimiento macroeconomico nunca llega a los sectores mas pobres.
Producto de la crisis provocada por el capitalismo neoliberal e improductivo, mas de 30 millones de ciudadanos estadounidenses todavia estan sin empleo, lo que es una amenaza real a una repostulacion del presidente Barack Obama, pese a sus enormes esfuerzos, en apenas dos anos, por revertir de negativo a positivo el curso de una economia cuasi quebrada como la de Estados Unidos en lento proceso de recuperacion.
Latinoamerica y el Caribe han sido golpeados con rudeza, producto de esa crisis global del neolieralismo. Aunque en menor escala de lo esperado, pues fue posible badear la tormenta y mantener estable, el crecimiento macroeconomico en casi todos nuestros paises por encima del 4%, como es el caso de la propia Republica Dominicana, donde la impunidad, la enorme corrupcion publica y la permisividad absoluta de las autoridades son el otro componente tragico de la crisis.
Es por eso que el crecimiento macroeconomico nadie lo ve abajo. Eso explica que, tras tres gobiernos del PLD, los niveles de pobreza extrema y exclusion social sigan igualitos o peores en Santo Domingo, con 1.5 millones de ciudadanos fuera de las politicas publicas en todos los ordenes. Enriquecer menos arriba, mejorar la clase media y reducir los niveles tan exagerados de corrupcion publica son los grandes desafios para atacar mas a fondo la pobreza y la exclusion social.
Seguimos inmersos en un callejon sin salida en toda la region, especialmente con los 40 millones de indigenas en America Latina y el Caribe, y los 50 millones de pobres e indocumentaos en los Estados Unidos, ciudadanos negros y latinos de barrios marginados y campesinos pobres, en su mayoria ignorantes, mal nutridos, desempleados, excluidos de la sociedad.
Anque Estados Unidos tiene programas sociales, como welfare, la section 8, en la vivienda, los cupones para los excluidos, el medicare y medicaid, la propia crisis fiscal, su enorme deuda externa de 14 trillones de dolares el neolieralismo impuesto por el economista norteamericano Milton Freedman, amenzan hasta sus programas sociales historicamente mas importantes, creados por el presidente Franklin Delano Roosvelth en 1936, tras la primera gran crisis economica de los Estados Unidos, 80 anos atras. La reforma de salud de Barack Obama, aprobada en el 2010 y que sera aplicada a partir del 2014, es un esfuerzo fundamental por salvar los excluidos y llevarles un poco de alivio y proteccion social con la cobertura medica universal.
Pero los excluidos en general, tanto en Estados Unidos como en Latinoameica y el Caribe, ahora mismo no tienen salud, educacion, alimentacion ni empleo seguro, producto de ese neoliberalismo cruel que los mantiene fuera del presupuesto de gastos publicos, y que solo promueve las ganancias enormes de los grandes capitales en Wall Street (Bolsa de Valores Mundial), ignora el desarrollo humano, la educacion y el bienestar social de los excluidos. La pobreza solo es vista como mercado de votantes.
Clientelismo politico con los excluidos a traves de la Tarjeta Solidaridad es la linea seguida en Santo Domingo por el presidente Leonel Fernandez, y el Partido de la Liberacion Dominicana (PLD), y por todos los gobiernos neoliberales de la democracia en los ultimos 60 anos. Programas que no estan atados a un plan de alfabetizacion para la liberacion social y economica de los mas pobres. Porque es preferible mantenerlos ciegos, ignorantes y nulos, como ciudadanos sin derechos civiles ni politicos, sin derecho a elegir y ser elegidos, sino como puros votantes. Son entonces eternos dependientes de esas migajas que no resuelven sus problemas de fondo. El neoliberalismo perfecto de Leonel Fernandez.
En la linea de combate a esa problematica , Brasil ha dado una leccion grande al mundo. Ignacio Lula D’Silva,en sus ocho anos de mandato, saco de la pobreza extrema a mas de 30 millones de brasilenos y los elevo a la categoria social de clase media. Una de las economias mas robustas de la region, con 8 por ciento de crecimiento anual, que dio una leccion contundente de que es posible el cambio, sin ruidos, sin chocar con capitales tradicionales, sin socialismos siglo XXI al estilo de Hugo Chavez. Solo con educacion y financiamiento de la pequena empresa.
Brasil ha dado el mensaje clave: en la sociedad capitalista moderna, sin revoluciones de extrema izquierda, es posible el desarrollo sostenible, es posible romper con el tugurio, la famela, el hambre y la desnutricion, con trabajo, disciplina y voluntad politica del Estado, en el marco de una sociedad democratica, plural y abierta.