Un grupo de indígenas de la etnia mashco piro en aislamiento voluntario mató a un nativo de otra comunidad de un flechazo en la selva amazónica del sur de Perú, informó ayer el Ministerio de Cultura en un comunicado. Un hombre de 20 años murió a causa de un flechazo en el pecho, disparado por los indígenas que ingresaron a una granja de la comunidad nativa de Shipetiari, en la región de Madre de Dios, y atacaron a los que se encontraron en su camino.
Del suceso, que se produjo el viernes pasado, alertó al día siguiente la Federación Nativa del río Madre de Dios y Afluentes (Fenamad) y hoy se hizo eco el Ministerio de Cultura.
El jefe médico del centro de salud con sede en Villa Salvación, Fernando Mendieta, se desplazó a la zona del ataque y constató lo ocurrido.
El Ministerio de Cultura lamentó la muerte del joven y señaló que esta es la tercera ocasión que un grupo de alrededor de treinta mashco piro ingresa en los dominios de la comunidad nativa de Shipetiari en lo que va del 2015.
El mismo grupo fue avistado en varias ocasiones en las riberas del río Alto Madre de Dios, cerca del riachuelo Yanayacu, muy próximo a los límites del territorio de la comunidad Shipetiari.
El Ministerio de Cultura había asignado de manera permanente agentes de protección y especialistas para atender a los nativos de Shipetiari ante los repetidos avistamientos de mashco piro en sus tierras, por lo que lamentó que, "pese a los esfuerzos desplegados, no fue posible evitar lo ocurrido el 1 de mayo".
La directora general de Derechos de los Pueblos Indígenas, Grecia Elena Rojas, se trasladó a la cuenca del río Alto Madre de Dios junto con un equipo de especialistas del viceministerio de Interculturalidad para establecer las medidas necesarias con las que dar seguridad a los habitantes de Shipetiari.
Al respecto, el presidente de la Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana (Aidesep), Henderson Renfigo, declaró a Efe que su organización exige que el Gobierno atienda las "demandas de los pueblos indígenas, primero para prevenir y proteger la vida de los pueblos no contactados".
"Entendemos nosotros que la reacción que han tenido los hermanos Mashco Piros, los no contactados que habitan dentro de esos territorios, (es porque) están amenazados por la presencia de madereros, de petroleros, de mineros ilegales, entre otros agentes externos de la zona", señaló Rengifo.
El dirigente lamentó la muerte del joven de 20 años y alertó que se trata de "una grave situación que vive la zona y puede haber un enfrentamiento en cualquier momento con los moradores de la comunidad y los no contactados."
"Estos pueblos no contactados ocupan, entre otros pueblos, la región Ucayali, Cuzco, hay un territorio aproximado de 9 millones de hectáreas que es donde habitan actualmente, por eso es que exigimos al gobierno peruano una demanda para la protección de estos territorios", remarcó.
Rengifo opinó que lo primero que corresponde es "reconocer los territorios de estos pueblos y algún día, cuando quieran salir, lo harán ellos solos."
"Pero no se les puede traer a ser contactados a la fuerza, ellos han decidido vivir así, con esa autonomía que tienen, y deben continuar hasta que ellos lo decidan", concluyó.