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domingo, 10 de agosto de 2014

Conociendo a Marcio Veloz Maggiolo

Nació el 13 de agosto 1936 en Santo Domingo. Poseedor de una obra sumamente versátil, tanto en temas académicos como literarios, la que ha sido traducida a varios idiomas, que incluye una extensa cantidad de títulos.
Novelista, cuentista, poeta, dramaturgo, ensayista, crítico literario, historiador, arqueólogo y antropólogo. Licenciado en Filosofía y Letras por la Universidad Autónoma de Santo Domingo, en Técnicas de Arqueología y Doctor en Historia de América (estas dos últimas en la Universidad de Madrid, España).
Ha ocupado importantes posiciones, tales como Subsecretario de Estado de Cultura, Director del Museo del Hombre Dominicano, Director del Departamento de Antropología e Historia de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, Director-fundador del Departamento de Extensión Cultural de la misma universidad y Director del Museo de las Casas Reales. Además y se ha desempeñado además como Embajador en varios países.
Entre los múltiples galardones que ha obtenido en su gloriosa trayectoria como escritor y humanista figuran: Premio Nacional de Poesía (1961) con Intus; Premio Nacional de Novela (1962) con El buen ladrón; Premio Nacional de Novela (1981) con La biografía difusa de Sombra Castañeda; Premio Nacional de Cuento (1981) con La fértil agonía del amor; Premio Nacional de Novela (1990) con Materia prima; Premio Nacional de Novela (1992) con Ritos de Cabaret; Premio Nacional de Literatura (1996); Premio Feria Nacional del Libro (1997); Premio de Literatura Infantil (2006) con La verdadera historia de Aladino. Es además miembro de número de la Academia Dominicana de la Lengua, entidad que lo propuso para el Premio Nobel de Literatura (2007). Marcio Veloz Maggiolo es sin dudas el escritor dominicano más premiado en nuestra historia.
Su bibliografía cuenta con obras de gran trascendencia en la literatura nacional como El sol y las cosas, Creonte [drama en un acto, , La vida no tiene nombre, Los ángeles de hueso, De abril en adelante: Protonovela, De dónde vino la gente, Novelas cortas, La palabra reunida, Florbella: arqueonovela, Apearse de la máscara, La mosca soldado, Cosecha de huesos, Poemas en ciernes, Cuentos, recuentos y casi cuentos,  La fértil agonía del amor, El Jefe iba descalzo, El buen ladrón y otros textos bíblicos, Uña y carne: memoria de la virilidad, Cuentos de otros milenios, El hombre del acordeón y La vida no tiene nombre entre otras.
Además de una cantera enorme de ensayos que  tocan diversos territorios temáticos (cultura, literatura e historia dominicanas y caribeñas, lingüística, política, arqueología, antropología, ciencia y medio ambiente), entre los que podemos mencionar a Cultura, teatro y relatos en Santo Domingo, Arqueología prehistórica de Santo Domingo, Las poblaciones aborígenes de la Isla Española en colaboración con Elpidio Ortega, Esquema para una revisión de nomenclaturas arqueológicas del poblamiento pre-cerámico de las Antilla sen colaboración con Plinio Pina y Manuel García Arévalo, Medio ambiente y adaptación humana en la prehistoria de Santo Domingo, Sobre Cultura dominicanas y otras culturas, Panorama histórico del Caribe precolombino, La isla de Santo Domingo antes de Colón, Barril sin fondo , Trujillo, Villa Francisca y otros fantasmas, Historia, arte y cultura en las Antillas precolombina y Memoria fermentada.
Veloz Maggiolo es un escritor comprometido,  que conoce a la perfección el manejo de la técnica escritural y el lenguaje nuestro, que aborda con magistral maestría y profundidad todos los géneros de la literatura, lo que lo convierte en uno de los principales artífices de las letras en República Dominicana. Es de rigor consultar su obra, a tal extremo que muchos coincidimos en que luego de desaparecido del plano terrenal Pedro Henríquez Ureña, Juan Bosch y Antonio Fernández Spéncer, Marcio Veloz Maggiolo es el humanista más relevante de nuestra  historia literaria. A todos estos atributos como escritor, poeta, investigador y ensayista de muchas luces, se le debe agregar su gran calidad humana. Marcio es un ser humano solidario y nunca cierra sus puertas para ayudar a nóveles y consagrados escritores que buscan su ayuda y consejos.
Concluyo esta entrega de TRAYECTORIAS LITERARIAS DOMINICANAS con un fragmento de un poema de la autoría de Marcio Veloz Maggiolo:
Proto-poema para villanos
(fragmento)

¿De dónde vienes?, le dijo Judas a Jesús:
¿No sabes acaso que cada año te queman?, contestó el Señor.
Vengo de Villa Francisca, un barrio antillano, de ver cómo ardes.
Te meten pólvora dentro, te sazonan con cohetes chinos,
te encienden.
Oh, no es posible, dijo Judas.
Sí que es posible. Entonces lo vimos transitar por las calles del barrio;
todos sabíamos quién era, Judas el de Iscariot.
El cura párroco le llamó, pero Judas no quiso.
El sargento le dijo que la Era de Trujillo era para entenderse
con la Iglesia.
"Yo inventé un poco eso" y bajó a la sala principal
de la Lotería Nacional
y allí vio el gran muñeco
que Ramón Saviñón mandaba a hacer cada año.
Judas con tafetán, sedas, turbantes sobrios y sonrisa amañada
funcionario de ahora.
Buscó a Mon y le dijo:
¿Qué mierda es esta Mon?, ¿quién coño eres tú para quemarme?
Entonces Mon gritó: ¡sacad a este loco de mi despacho,
llamad la guardia, colgadlo!
Y Judas retornó sonriente. Había resistido el tiempo
y el sábado moría. Lo quemaban, y miles de estudiantes
miraban su incendiado cuerpo.
Taciturno, cansado, le dijo a su edecán en arameo:
me cago en la historia, oh filisteos,
mientras Jesús volvía a resucitar y se le vería muerto de risa
por los siglos de los siglos.

Por Ramón Saba