Omega dice que no asistió al juicio de fondo que se le sigue por supuestamente maltratar a una bailarina porque no fue citado debidamente.
“Soy un azarao. Se la han cogido conmigo. Me han tipificado como el muchacho malo de la película y yo no soy así”, indicó.
Los abogados del artista advierten que ha sido un error del tribunal que mandó la citación del juicio a otro domicilio que no era del cantante ni de sus defensores.
Omega se trasladó desde Bávaro, donde tenía programada una fiesta, para regularizarse con la justicia.
Por su presentación voluntaria, a partir de ahora la situación del artista se regulariza y los impedimentos de salida, la orden de arresto y el estado de rebeldía quedan levantados por el tribunal.
La nueva audiencia quedó fijada para el próximo 8 de julio.
