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jueves, 11 de abril de 2013

El Torito y el Soberano: ¿Quién dijo que se debe esperar que alguien enferme o muera para Premiarlo?

Apenas acaba de concluir la primera entrega de los premios el “Soberano” y de inmediato nos encontramos con opiniones a favor y en contra sobre ¿por qué se le entregó el Gran Soberano a “Héctor Acosta” en vez de a fulano o mengano?
La verdad si vamos a tomar como parámetros la edad, el tiempo en el oficio, la enfermedad entre otros, no cabe dudas que “El Torito” pudiera seguir esperando a que se le cumpla una o varias de estas alternativas.
Lamentablemente la premiación es una vez por año y a un sólo gran ganador, es decir que las posibilidades son inversamente proporcionales a la cantidad de candidatos que cada año reúne y acumulan todos los achaques mencionados, todos con suficientes méritos profesionales para merecer el “Gran Soberano”
Pero resulta que en el caso específico de “Héctor Acosta” en esta primera entrega de premios el “Soberano” le ha tocado a él y qué bueno que haya ocurrido a si, pues es un “Torito “que viene brincando cercas desde hace mucho tiempo, a pesar de que mantiene cara y estatura de adolecente.
“Héctor Acosta” no es artista que alcanzó la fama y popularidad de la noche a la mañana. En mi caso, lo vi por casualidad cantar en Bonao en una bebentina que desconozco si todavía existe pero si mal no recuerdo se llamaba “El Yaraví”. Aquello daba pena, lo único que tenía era voz.
No quiero hacer un recuento de su trayectoria, pues para eso tenemos a “Google y Wikipedia” aunque siempre nos viene bien refrescar la memoria y recordar que a los pobres las cosas no nos caen del cielo porque sí.
Pero el que quiera saber cómo "se guaya la yuca" para obtener en bien las cosas, tiene en Héctor Acosta el mejor de los ejemplos, sobre todo en un país donde las oportunidades son calvas y se tienen que agarrar por las greñas.
Hoy es fácil admirar al gigante de voz que ha sabido llevar con orgullo por el mundo nuestras dos principales banderas musicales: “Bachata y Merengue”. A un artista que es reconocido y aplaudido por nacionalidades que nada tienen que ver con nuestras costumbres.
Un “Torito” con más de 20 años de carrera artística ininterrumpida, presentándose en los más importantes escenarios del mundo, con una discografía de éxitos única: “Merenguero, bachatero, baladista” , además nominado en diferentes e importantes premiaciones internacionales.
Celebramos con mucho entusiasmo, tan importante distinción a buena hora y muy merecido, por ser un digno embajador de nuestra música, por demostrar que es un ser humano potable, de gran corazón, con mucha fe en Dios, en su país, en la familia y en sí mismo. Héctor Acosta usted es el Gran Soberano. (soylatino.net)
 
 Por Agustín de la Cruz (Sugar)