(Efe) «En primer lugar vamos a orar todos por la salud del presidente Chávez que como decía el vicepresidente (Nicolás) Maduro se encuentra delicado, vamos a pedirle a Dios que lo fortalezca en estos momentos y por otra parte, la incertidumbre se va a disipar plenamente el 10 de enero».
El prelado, quien ofreció las declaraciones durante una breve entrevista al canal privado Globovisión, apuntó que en esa fecha se sabrá «si es que no se sabe antes, como ha evolucionado la salud del presidente» y añadió: «se sabrá a que atenernos todos». Asimismo, señaló que los venezolanos deben tener «una gran confianza en la sensatez de todos los dirigentes políticos (...) en el sentido de que deben apegarse a lo que está planteado en la Constitución nacional».
La salud de Chávez, quien se encuentra hospitalizado en Cuba en estado «delicado» tras una intervención quirúrgica a la que fue sometido el pasado 11 de diciembre, mantiene a Venezuela en un clima de incertidumbre. El ministro de Ciencia y Tecnología de Venezuela, Jorge Arreaza, quien se encuentra en La Habana acompañando al mandatario y a sus familiares junto al vicepresidente Nicolás Maduro, dijo ayer que Chávez había pasado el día «tranquilo y estable» y pidió a los venezolanos no dejarse llevar por los rumores.
El pasado domingo, Maduro también se pronunció desde Cuba y reportó que el estado de salud del presidente «continúa siendo delicado» tras sufrir «nuevas complicaciones» postoperatorias generadas por una infección respiratoria que le sobrevino pocos días después de la intervención quirúrgica.
La posibilidad de que Chávez no pueda asistir al acto de investidura presidencial el próximo 10 de enero ha abierto la discusión en el país sobre la constitucionalidad o no de aplazar esa ceremonia.
El prelado, quien ofreció las declaraciones durante una breve entrevista al canal privado Globovisión, apuntó que en esa fecha se sabrá «si es que no se sabe antes, como ha evolucionado la salud del presidente» y añadió: «se sabrá a que atenernos todos». Asimismo, señaló que los venezolanos deben tener «una gran confianza en la sensatez de todos los dirigentes políticos (...) en el sentido de que deben apegarse a lo que está planteado en la Constitución nacional».
La salud de Chávez, quien se encuentra hospitalizado en Cuba en estado «delicado» tras una intervención quirúrgica a la que fue sometido el pasado 11 de diciembre, mantiene a Venezuela en un clima de incertidumbre. El ministro de Ciencia y Tecnología de Venezuela, Jorge Arreaza, quien se encuentra en La Habana acompañando al mandatario y a sus familiares junto al vicepresidente Nicolás Maduro, dijo ayer que Chávez había pasado el día «tranquilo y estable» y pidió a los venezolanos no dejarse llevar por los rumores.
El pasado domingo, Maduro también se pronunció desde Cuba y reportó que el estado de salud del presidente «continúa siendo delicado» tras sufrir «nuevas complicaciones» postoperatorias generadas por una infección respiratoria que le sobrevino pocos días después de la intervención quirúrgica.
La posibilidad de que Chávez no pueda asistir al acto de investidura presidencial el próximo 10 de enero ha abierto la discusión en el país sobre la constitucionalidad o no de aplazar esa ceremonia.