Johnny Cueto alertó a los Rojos de Cincinnati después de su calentamiento que
había sentido un dolor agudo en el costado derecho de la espalda cuando realizó
sus últimos dos lanzamientos en el bullpen.
El pitcher dominicano sólo permaneció el sábado en el montículo ocho
lanzamientos después de eso. Abandonó el primer juego de la serie divisional de
la Liga Nacional contra los Gigantes de San Francisco en la primera entrada
debido a espasmos en la espalda, y entonces los Rojos lucieron dominadores para
derrotar por 5-2 a los Gigantes respaldados por su estelar bullpen.
“Me siento realmente orgulloso de mi equipo. Me siento orgulloso de los
lanzadores”, dijo Cueto. “Todos salieron y realizaron su trabajo”.
Los Rojos señalaron que Cueto será evaluado día por día. El derecho lanzó un
segundo strike al segundo en el orden al bate de los Gigantes, el venezolano
Marco Scutaro, y se alejó de la lomita mostrando dolor. Un preparador físico y
el manager Dusty Baker se apresuraron a revisarlo, y el ganador de 19 juegos en
la temporada regular dejó el juego momentos después.
Ahora, los Rojos esperan tenerlo de regreso en esta serie. Cueto quiere ver
cómo responde el domingo.
“Realmente me siento mejor en este momento”, comentó Cueto después del juego.
“Es la primera vez que me ocurre”.
Dominó al primer bate, el puertorriqueño Angel Pagán, con ponche. Durante su
oportunidad al bate, Pagán se salió de la caja de bateo y se le concedió tiempo.
Cueto al parecer no lo vio y continuó su movimiento, pero Baker dijo que el
coach de pitcheo Bryan Price lo había alertado con anterioridad sobre el
malestar que sentía Cueto.
Los Rojos acudieron a Sam LeCure, el ganador, y contaron con cuatro entradas
de relevo de Mat Latos con descanso de tres días por primera vez en su carrera,
quien fue seguido de tres relevistas más.
Cueto realizó ocho lanzamientos, seis de ellos de strike, en la permanencia
más corta en el montículo en postemporada para un abridor desde que John
Thomson, de Atlanta, duró un tercio de entrada en el tercer juego de la serie
divisional de la Liga Nacional de 2004 contra Houston. Thomson salió el juego
con dolor muscular en el costado izquierdo.
“Cuando Johnny sucumbió, pensé: `Dios, oh no, estamos perdidos. ¿Por qué?
¿Por qué? ¿Por qué?”’, dijo Brandon Phillips. “Hablamos y dijimos, `ganemos este
por Johnny”’.
AP.