Por Vanessa Gera.
Este domingo se celebró una misa especial para los que consideran que la hostia es un milagro. El arzobispo de Bialystok, Edward Ozorowski, señaló durante la ceremonio, que en la historia, la "sustancia del cuerpo o la sangre de Cristo se ha vuelto evidente para los sentidos humanos, y esto pasó en Sokolka". Y concluyó: "Para Dios, nada es imposible".
La hostia con el punto fue transportada en alto en un relicario por un sacerdote en túnica dorada durante una procesión y fue puesta en exhibición en la iglesia del pueblo de San Antonio, mientras unos 1.000 fieles miraban, según un informe e imágenes transmitidas por el canal de televisión TVN.
Los católicos creen que el pan y el vino que utilizan los sacerdotes durante el sacramento de la comunión, o eucaristía, se convierten en el cuerpo y la sangre de Cristo.
La hostia se le cayó a un sacerdote mientras celebraba la comunión en 2008 en el pueblo Sokolka. De acuerdo con las prácticas de la Iglesia, el sacerdote puso la hostia en agua para disolverla. Varios días después una monja encontró que la hostia no se había disuelto por completo y vio una marca roja en ella.
El descubrimiento de la monja desató el interés entre los fieles en este país profundamente católico, y provocó muchos viajes a Sokolka. Aunque algunos creyentes consideran al objeto un milagro, el Vaticano aún examina la materia y no ha tomado una decisión oficial sobre si declararlo un milagro, explicó Andrzej Debski, portavoz de la iglesia.
Un grupo de racionalistas se quejó al respecto en 2008 y pidió a las autoridades que investigaran si un asesinato o algún otro crimen estaba involucrado en caso de que fuera tejido humano lo que se encontró en el agua. La policía dice que no tiene ninguna evidencia de algún crimen.
Fuente: AP.