El asesor del Poder Ejecutivo en Asuntos de Narcotráfico, doctor Marino Vinicio Castillo, advirtió que el incremento selectivo de la delincuencia que se está viendo en el país está conectado a las necesidades y el mal humor del crimen organizado. Al ser entrevistado por el periodista Federico Méndez, en el programa “Esferas de Poder”, que se transmite los domingos de 5:00 a 6:00 de la tarde, por Santo Domingo TV, consideró que el país debe tener una visión muy clara y serena, porque no puede confundirse y perder de vista dónde está el verdadero peligro.
“De manera que hay que ver el fenómeno criminal creciente que tenemos como un resultado del desagradable mal humor que le produce al crimen organizado esas contrariedades”, dijo.
Castillo comentó que la idea es que se trata de un fenómeno criminal, archiconocido, transnacional, con patrones de conducta preestablecidos, “pero que no hay que separarlo del análisis del fenómeno político”.
El jurista manifestó que la delincuencia está en las calles insolentemente produciendo lo que crea y sin castigo como secuela.
“Cuando la interdicción logra agarrarlos, cuando la fuerza del orden logra agarrarlos, ellos saben que es un mero trámite y que el evento penal para ellos no existe”, dijo.
El asesor antidrogas consideró que la Justicia de hoy es un sainete, una pasarela y exhibición de moda en procesos que se han convertido en una especie de farándula.
Castillo advirtió que para el narcotráfico ese es un ambiente fascinante, porque tienen todo el dinero del mundo para sobornar y meterse en todas partes. “Tienen contacto en todas partes, donde menos se imagina la gente”, recalcó.
Comentó que una de las características del crimen es que le disputa los espacios a la sociedad, especialmente al Estado.
Aseguró que se debe luchar en contra de ese mal, lo cual no solo es una tarea del Gobierno, sino de la sociedad, como son los clubes, las iglesias y la prensa. “Hacer esfuerzos comunes conjunto para tratar de rebotar y resistir el ataque, es un ataque serio”, sostuvo.
El jurista aseguró que hay que hacer esfuerzos en la prevención del consumo de drogas, curar y rehabilitar a los adictos, porque esa es una epidemia peor que el cólera.
“Nosotros tenemos decenas de miles de muchachos y muchachas, definitivamente, con un proceso de calcinamiento cerebral fruto de la droga dura y esas son bajas sociales”, dijo.