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viernes, 30 de septiembre de 2011

Un carterista le llevó el celular y dinero al sacerdote que lo estaba confesando.


Santiago, República Dominicana .- Los católicos santiagueros hoy han reaccionados indignados al enterarse del asalto del que fuera víctima el sacerdote Carlos Santana, precisamente cuando terminó de darle absolución a un joven de unos 25 años de edad.

Narró el guía espiritual, que “un prójimo me pidió que lo confesara después de la misa que oficiaba en la Casa de Maus, próximo a la Catedral Santiago Apóstol, de la calle general Benito Monción, en la ciudad de Santiago de los Caballeros”.

Agregó el religioso, que “cuando le daba la absolución me sacó el celular del bolsillo y algo de dinero. Por ahora estoy incomunicado telefónicamente”.

Con esas palabras, el canciller del arzobispado de Santiago de los Caballeros, sacerdote Carlos Manuel Santana, describe en su cuenta de Facebook cómo fue asaltado por un joven al que había “confesado”.

Según el sacerdote, el joven se veía “triste” y le dijo que quería confesarse a lo que el accedió. Y que cuando confesó y dio la absolución al joven, éste le dijo que sentía un gran alivio y que se había quitado un gran peso de su alma.

Explicó, que después el joven de unos 25 años de edad, lo abrazó y rápidamente le sacó dinero del bolsillo, le arrebató el celular y se fue corriendo.

Detalla, que el ladrón se hizo pasar por uno de sus más fieles creyentes, y que esperaba para recibir el sacramento de la confesión en la Iglesia de Maus en el centro histórico de Santiago de Santiago de los Caballeros.