Por: Agustín de la Cruz -Al parecer la naturaleza se ha ensañado con el Sr. Nelson Peña y le ha cobrado con el desfile, lo que según sus demandantes, aun no ha podido cobrarle la justicia.
Luego de consultar a diferentes personalidades con conocimiento sobre pasados desfiles, todas coinciden que no existe precedente en ningún desfile de los que se han realizan en la ciudad de Nueva York, que haya sido castigado por la naturaleza con tanta furia.
Usted llámele coincidencia o justicia divina, pero de que lo que ocurrió hoy sobre pasa lo normal, de eso quienes lo vivimos en la 6ta Av. No nos queda ninguna duda.
Llover desde la noche anterior y acampar 2 horas después, como si no hubiese caído una gota de lluvia, luego que las autoridades determinarán ponerle fin al desfile antes de la hora establecida, es un tema que llama a la reflexión.
Lo lamentamos por los inocentes como mis hijas que con toda ilusión asistieron a lo que sería su primer desfile, y decimos que lo lamentamos por que como ellas, cientos desafiaron las lluvias para disfrutar de algo que por Dominicanidad les pertenece, y no son responsables de los malos augurios que envuelve a los organizadores del desfile.
El Sr. Nelson peña puede que tenga las mejores intenciones, además nadie puede negar que es un fajador, y lo demuestra el hecho que este celebrando 30 años consecutivo de desfile, que es un record que merece se le reconozca, pero tan solo con intenciones no basta, es importante tener las cuentas claras con el prójimo, porque la verdad no necesariamente la tiene el que más alto habla, y cuando nuestro volumen de voz sobre pasa la normalidad es pura señal que estamos o nos hacemos los sordos.
Todo lo que comienza mal no puede terminar de otra manera y ojala que para el próximo año el Sr. Nelson Peña o quien esté al frente de organizar tan importante evento, no tenga que pulgar por tantos desaciertos