Odalís Báez
Pedernales
Gran pesar ha causado en esta provincia el fallecimiento del sacerdote Avelino Fernández Amador, quién ejerció su sacerdocio por varios años en la parroquia Católica “Nuestra Señora de La Altagracia, donde hizo grandes aportes y enfrentó situaciones por el bien de la comunidad.
Fernández Amador, para la sociedad Pedernalense, comunidad cristiana y sectores ligados a la vida social, fue un hombre ejemplar que desde su carrera religiosa hizo grandes aportes para el crecimiento de esta comunidad fronteriza.
“La muerte de Avelino Fernández deja enlutecida y con el más apegado recuerdo a los hombres y mujeres que apreciaron su dedicación y amor por los demás, así como la solución de algunos problemas comunitarios”, expresan opiniones comunitarias recogidas en esta zona sur de la frontera.
El sacerdote fue un propulsor y maestro de Pedernales, donde realizó una lucha a favor de los mejores intereses de este pueblo y que hoy se queda en el recuerdo.
En esta comunidad Fernández fue sustituído por el sacerdote Raúl Pérez Ross, quien se encuentra en el exterior. Posteriormente a la parroquia de Pedernales le han seguido otros sacerdotes como Juan Antonio Féliz, Milton Pérez, Germán Pérez y en la actualidad se encuentra el sacerdote Antonio Fernández.
Los restos del sacerdote Avelino Fernández Amador serán sepultados este miércoles en el nuevo cementerio de Barahona.
El cadáver de Fernández Amador llegará hoy al municipio de Barahona, donde será sepultado, informó el Obispo de la Diócesis en una nota de prensa.
Los restos del sacerdote de origen cubano serán velados en la funeraria El Ángel de la calle Anacaona, en la parte baja de Barahona.
A las 8:00 de la mañana de este miércoles, el cadáver de Fernández Amador será llevado a la Catedral Nuestra Señora del Rosario, donde asistirán personalidades de la Iglesia, la región sur del país y comunitarios.
A las 10:00 de la mañana hoy, el obispo Rafael Leonidas Felipe Núñez encabezará una misa y después será sepultado en el nuevo cementerio “Américo Melo”, ubicado frente a la urbanización Blanquizales a la entrada de esta ciudad.
Fernández Amador murió este lunes en Santiago por un infarto en el Centro Médico Cibao. Tenía 77 años.
El religioso estuvo de servicio en Pedernales, Barahona y otras localidades de esta región.