Las condiciones de votación anticipaban las consecuencias que tendría la eventual aprobación del programa de recortes en los manifestantes que rechazan las medidas. El Parlamento tomó la decisión envuelto en una nube de gases lacrimógenos disparados por la Policía, que buscaba aplacar las ya violentas protestas.
En una votación reñida, los congresistas finalmente respaldaron el plan de austeridad exigido por el FMI y la UE para destrabar el rescate, que prevé un ahorro de más de US$ 40 mil millones en tres años y otros US$ 72 mil por privatizaciones.
Las reacciones no se hicieron esperar. En las calles de Atenas, explotó la ira de cientos de opositores al recorte, que se enfrentaron a las fuerzas de seguridad con piedras, palos y bombas incendiarias y rompieron edificios del centro de la capital griega.
Algunos manifestantes encapuchados prendieron fuego una oficina de correos en la planta baja del Ministerio de Finanzas, incendio que fue sofocado al poco tiempo. En tanto, en otro punto de la ciudad, los bomberos también debieron intervenir para liberar a siete personas atrapadas en la segunda planta del Eurobank, incendiada por las bombas molotov lanzadas por un grupo de radicales.
Mientras en la plaza central de Sintagma eran destruidas las fachadas de dos bancos y varias tiendas, dos diputados resultaron heridos, aunque algunos de sus compañeros lograron protegerlos de la muchedumbre enardecida .
La Policía había detenido a varias decenas de personas, la mayoría de las cuales deberá comparecer ante la Justicia el jueves. Según informaron las autoridades, entre los más de cien heridos que dejaron los enfrentamientos habría al menos 31 agentes de seguridad. Varios de ellos están hospitalizados.
Una reacción muy distinta tuvieron los mercados. Los indicadores financieros hicieron notar su alivio por la noticia del acuerdo parlamentario en Grecia, que parece alejar de momento el peligro de que el país entre en una cesación de pagos estatal y, con ello, estalle una crisis financiera en europea.
Según el diario El País, las Bolsas de Valores de los países del Viejo Continente registraron subas destacadas, en sintonía con el optimismo que habían mostrado en la jornada anterior.
"Se evitó un desastre", celebró un analista. Otros expertos apuntaron que la aprobación era previsible, por lo que las Bolsas ya habían subido en los últimos días y su reacción de hoy fue positiva, pero no desbordante. "Expectativas cumplidas, no más", sentenció Robert Halver, del Baader Bank.
En los Estados Unidos, el Dow Jones ganó un 0,61% y el Nasdaq 0,41. También el barril de petróleo registró una suba importante.
La reacción se sintió incluso en Latinoamérica: el real brasileño cerró al máximo de los últimos dos meses y lo mismo ocurrió con el cobre en Chile. El peso mexicano subió igualmente su valor.
Respaldo internacional
La decisión del Parlamento griego fue saludada por la Unión Europea, el bloque que sigue con mayor interés la crisis del país mediterráneo debido a sus lazos financieros. "Ha sido un voto de responsabilidad nacional", dijo el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, en un comunicado.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) celebró lo que calificó como una "buena noticia" y una medida "necesaria", según el diario español El Mundo. La misma expresión utilizó la canciller alemana, Angela Merkel, quien fue una de los líderes más duros en las negociaciones.