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miércoles, 18 de mayo de 2011

Un Contacto a tiempo con Emmanuel Rojas

Por Bolívar Balcacer.




Una de las frases cumbres del poeta Demetrio de Falero es "Un hermano puede no ser un amigo, pero un amigo será siempre un hermano". Sin embargo es Rabindranath Tagore quien da en el clavo al referirse a la Amistad, lapidando que "La verdadera amistad es como la fosforescencia, resplandece mejor cuando todo se ha oscurecido".
A las 5:21 de la tarde de este Miércoles después de caminar largo trecho indagando sobre el destino final de Emmanuel Rojas director del periodico independiente Evolution Press, logré dar con el hospital donde se encuentra hospitalizado el King County de Clarkson Ave, allí localicé un teléfono privado y procedí a llamar a Emmanuel, hablamos un largo rato, me expuso el colega que decidió internarse de forma voluntaria porque había caído en una profunda depresión al no poder ver a su Madre por años que al parecer está enferma en Dominicana, al igual que un hijo y él carente de documentos, se siente impotente ante tal situación.
Muchas cosas se han tejido sobre el internamiento de Emmanuel, han surgido los médicos, los sicólogos, los psiquiatras y los sabiondos que tenemos en la comunidad dominicana de New York, pero también han aparecido los hijos de Pierre de Coubertin que han corrido como gacelas para no tender la mano al compañero en desgracia, tal cual lo hacen con el Chino Estrella, lo mismo que hicieron con Ricardo Paredes, con Thomas Polanco y con el siempre recordado Nelson Rossi, los campeones del decathlon de la apatía que se anida en los medios de comunicacion tanto en Dominicana como en New York, los criticones buenos para nada.
Emmanuel no ha salido de su estado depresivo, hoy cuando hablé con él, le manifesté si quería irse de los Estados Unidos, le informé de algunos amigos con los cuales contacté ante la desgracia que vive y le informé de lo que sucede, me reiteró que su mayor problema es la falta de su madre y de su hijo que quedó niño en dominicana y que ultimamente anida en su mente, llegó más lejos y me dijo "Hoy dentro de mi soledad puedo decirte que siento cuan solo estoy, como he sido olvidado por muchos" le explique que había preocupación y que al fin dimos con el hospital y el Teléfono debido a contactos oficiales que hicimos, porque desconocemos quien es su hermana y en un número de Teléfono que se dió sale una maquina.
En nuestro dialogo me pidió libros, libros como siempre para leer porque es su hobbie, me pidió ayuda con una simple llamada diario mientras esté en el hospital, pero también me manifestó que se siente cómodo y está atendiendo todo cuanto le están sugiriendo los médicos del King County, "Yo lo decidí así, yo pedí un psiquiatra voluntariamente, eso no dice que estoy loco, pero si muy deprimido y para cometer un desacato ante la sociedad, decidí voluntariamente venir al hospital después de hablar con una amiga y esta con mi hermana"
Algunos compañeros han escrito articulos preocupados realmente, pero otros por el amarillismo del periodismo que se cuece en New York entre los dominicanos, más la maldita cizaña que se riega como el gratey desde la patria, en vez de ayudar lo que hace es que nos divide más, dan asco los verdugos del periodismo que disfrutan reproduciendo vacuencias, lo peor que quieren pintarse de monjes cuando en realidad son demonios anacrónicos, se le va el tiempo en hacer coro sin importarle el principio de ética periodistico.
Emmanuel no tiene los recursos que da la ciudad entiendase Medicaid, Seguro Médico y el disability porque es un indocumentado como hemos dicho, por lo que es deprimente y hasta pestilente leer en ciertos portales como muchos Come M….de la comunicación que no tienen el valor de dar su nombre lo hacen desde portales enemigos de los comunicadores dominicanos neoyorquino pero de forma anónima.
Aparte de su hermana, Emmanuel ha autorizado visitas de Minerva Saint Hilaire, de su amiga Nita Adames y de Luis Alfredo Collado quien ya lo visitó y de quien esto escribe, estaremos el viernes visitándole y dándole apoyo moral que es lo que él necesita y han recomendado los facultativos, si fuere necesario alguna colecta entonces lo haremos saber, para nadie es un secreto que la situación del periodismo aquí es calamitosa, pero también en dominicana, eso lo saben los que se quieren tirar el peo más alto que su cabeza, ellos? los críticos sembradores de maldad que se alegran del mal ajeno pero que ocultan su doble miseria, la mental y la económica, que no le tienden la mano a decenas de colegas que están pasando las mil y quinientas en Republica dominicana mientras ellos se ufanan de su lumpeneria y lambonismo.
Los Médicos que asisten a Emmanuel trabajan su situación y un equipo fuera, trabajamos otras encomiendas, pero no tenemos que estar pregonando a los cuatro vientos por el simple echo de querer protagonismos innecesarios, se ha tocado puertas por si se requiere una salida rápida, no solo para el caso de Emmanuel sino también para la situación del Chino Estrella quien lo ha dado todo y algunos comunicadores irresponsables han querido justificar su no apoyo al Chino con pequeñeces de que no publican porque mantienen contradicciones con quien esto escribe, se quiere más bajeza que esa?, si tan periodistas son, ya conociendo el caso, lo prudente es que produzcan su propia nota, pero no tienen tiempo porque como son pordioseros necesitan lamberle el trasero al amo del dolar.
Es de ahí que apoyamos sin reservas el comentario que hoy vierte en su portal rosassinespinas, la amiga Lissette Garcia, por lo que pedimos a los" todologos de ultima hora" que si no tienen nada que inventar, que se busquen un palito, un poco de Mierda y hagan bolitas de pupú y salgan a venderlas a las calles de Santo Domingo y de New York.
Termino diciendo como dijo el Sabio Salomón en Eclesiastes 3-1-8, Hay un momento para todo y un tiempo para cada cosa bajo el sol: Un tiempo para nacer y un tiempo para morir, un tiempo para plantar y un tiempo para arrancar lo plantado; un tiempo para matar y un tiempo para curar, un tiempo para demoler y un tiempo para edificar; un tiempo para llorar y un tiempo para reír, un tiempo para lamentarse y un tiempo para bailar; un tiempo para arrojar piedras y un tiempo para recogerlas, un tiempo para abrazarse y un tiempo para separarse; un tiempo para buscar y un tiempo para perder, un tiempo para guardar y un tiempo para tirar; un tiempo para rasgar y un tiempo para coser, un tiempo para callar y un tiempo para hablar; un tiempo para amar y un tiempo para odiar, un tiempo de guerra y un tiempo de paz.
Hasta nuestro proximo Comentario